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Al menos 80 personas han perdido la vida en una explosión causada por un atentado suicida durante una manifestación de la minoría hazara en Kabul, según informan medios afganos. Otras fuentes apuntan a que han sido dos atentados suicidas simultáneos. El ataque ha sido reivindicado por el autodenominado Estado Islámico.

La deflagración ha provocado decenas de heridos, según informan fuentes del Ministerio del Interior del Gobierno afgano. Las primeras fotografías distribuidas por redes sociales muestran varios cuerpos tendidos en el suelo.

Este sábado miles de hazaras se han manifestado en la capital afgana para exigir que la nueva línea de alta tensión entre Turkmenistán y Kabul pase por dos provincias donde hay una gran concentración de población hazara, Wardak y Bamiyán.

«¡Justicia!» o «¡Muerte a la discriminación!» han sido algunas de las consignas que han coreado los hazaras, que han ondeado banderas afganas, informa la agencia de noticias Reuters. La manifestación ha sido cerca de la Universidad de Kabul, a varios kilómetros de la sede del Gobierno.

Las fuerzas de seguridad han clausurado el centro de Kabul levantando controles y barricadas de palés y varios helicópteros sobrevuelan la ciudad, aunque por el momento no se han producido disturbios.

«La gente que ves no ha venido para irse con las manos vacías», ha asegurado Mohammad Hussain Ahmadi, de 33 años, en declaraciones a Reuters. «El Gobierno tiene que cambiar la ruta o las manifestaciones seguirán durante semanas», ha advertido.

El Gobierno rechaza esta posibilidad puesto que asegura que costaría millones y retrasaría durante años un proyecto fundamental para abastecer a Kabul. Además, sostienen que el suministro eléctrico de Wardak y Bamiyán está garantizado y que no hay discriminación contra esta minoría chií que supone un 9 por ciento de la población.