En un reciente estudio se informa que las fotografías tomadas a Fobos muestran grietas y fisurasen su superficie. Éstas sugieren que la luna más grande y cercana a Marte está colapsándose sobre sí misma. En un plazo de entre 30 y 50 millones de años (apenas un suspiro en términos astronómicos), Fobos terminará fragmentándose en múltiples pedazos y formará un anillo alrededor del Planeta Rojo.
Este colapso se está produciendo por las llamadas fuerzas de marea gravitatoria, especialmente intensas al superar esta luna el Límite de Roche. Este límite explica que cualquier satélite que se acerque a cierta distancia de su planeta (2,46 veces el radio de éste, siempre y cuando ambos cuerpos tengan una densidad similar) experimentará una diferencia de fuerzas de atracción entre sus puntos más cercano y lejano al propio planeta que superará su fuerza de cohesión, hecho que llevará a su fragmentación.
Fobos se encuentra a unos 6000 km de distancia de Marte, lo que le convierte en el satélite más cercano a su planeta de todo el Sistema Solar. Por si fuera poco, la órbita de Fobos va en el sentido contrario al de la rotación de Marte (es retrógrada), lo que hace que el planeta le vaya restando momento angular en cada órbita. Así, cada 100 años la luna se acerca 2 metros a su planeta.
Descubierta por el astrónomo americano Asaph Hall en 1877, nos encontramos ante una luna que presenta múltiples curiosidades. Tal y como se aprecia en la fotografía anterior, Fobos es muy oscura. De hecho, es la luna más oscura de todo el Sistema Solar y aún no se sabe por qué, aunque es posible que sea polvillo carbonáceo relacionado con su formación.
La irregular forma de Fobos (27x21x18 km), junto con el sentido de su órbita sugería que se trataba de un asteroide capturado (al igual que Deimos, la otra luna marciana) por la gravedad del Planeta Rojo. Sin embargo, su densidad es extraordinariamente baja (menos de 2g/cm3), muy por debajo de los valores medios de los asteroides.
Otra de las peculiaridades de este satélite es que al ser tan cercana su órbita a su planeta (está muy por debajo de la órbita sincrónica), desde la superficie de Marte se le ve salir por el oeste y ponerse por el este en apenas 4 horas y 15 minutos, aproximadamente 2 veces cada día marciano (que dura unas 24 horas y 37 minutos).
Sin embargo, otros estudios apuntan a que el origen de Fobos podría haber sido similar al de nuestra Luna. Es decir, en el pasado un protoplaneta impactó contra Marte, eyectando una enorme cantidad de material al espacio que posteriormente se ha agregado y formado las lunas marcianas. De hecho, recientes estudios gravitatorios sugieren que la estructura de Fobos es especialmente endeble: está formado por escombros, con una capa de polvo fino en su superficie de no más de 100 metros de espesor, lo que haría que el efecto de las fuerzas de marea sería aún más intenso debido a la inherente fragilidad estructural de este satélite.
De todas todas, parece que la suerte está echada para esta peculiar luna, aunque aún le queden varios millones de años dando vueltas en torno a Marte. Una vez se colapse, la visión de un anillo alrededor del Planeta Rojo puede ser espectacular. Pero la gravedad terminará reclamando lo que es suyo y los fragmentos que formen el anillo irán cayendo poco a poco sobre la superficie marciana. Simulaciones hechas con ordenador apuntan a que estos anillos podrían durar entre 1 y 100 millones de años.
Este artículo nos lo envía Víctor Manchado (@VManchado), informático y técnico de telecomunicaciones a partes más o menos iguales. Astrónomo aficionado y coleccionista de meteoritos, empecé a dedicarme a la divulgación en 2009, con la creación del blog ‘Pirulo Cósmico‘, sobre astronomía.
Referencias:
http://www.nature.com/ngeo/journal/v8/n12/full/ngeo2583.html
http://www.nasa.gov/feature/goddard/phobos-is-falling-apart
http://www.nature.com/ngeo/journal/vaop/ncurrent/full/ngeo2742.html