En algún lugar de los confines del espacio se encuentra una misteriosa anomalía gravitatoria que está arrastrando todo hacia ella, incluso a la Vía Láctea y, por lo tanto, también al sistema solar y la Tierra. Sin embargo, no representa ningún peligro para la humanidad, según un artículo publicado en la revista ‘Space’.
Se trata del Gran Atractor, que tiene una fuerza gravitacional tan fuerte, que arrastra a cientos de galaxias, incluida la nuestra, a lo largo de una región de millones de años luz. El astrofísico Paul Sutter, de la Universidad Estatal de Ohio (EE.UU.), asegura que esta región galáctica es «un volumen de espacio en el que todas las galaxias en ese espacio fluyen a un centro común».
En el 2014, el telescopio espacial Hubble de la NASA captó la destrucción de la galaxia ESO 137-001 mientras era atraída por el Gran Atractor. Pero afortunadamente, esta misteriosa anomalía gravitatoria «no destruirá nuestra galaxia, porque nunca vamos a llegar a ella», afirma Sutter.
Según el astrofísico, la Vía Láctea no correrá la misma suerte que ESO 137-001 debido a que «hace unos 5.000 millones de años, la energía oscura comenzó a dominar nuestro universo». «No sabemos exactamente qué es la energía oscura, pero sí sabemos que está provocando que la expansión de nuestro universo se acelere», agregó.
RT