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Es curioso que los conflictos armados sucedan por lo general en la zona ecuatorial, la zona más caliente del planeta. ¿Por qué? Todo tiene su razón, hay motivos de por qué suceden estas situaciones bélicas y enfrentamientos sin fin, generados en zonas entre ambos Trópicos por lo general (la banda de la violencia).
Si ponemos atención, los conflictos han involucrado generalmente a los países situados en la zona mencionada: Israel, Arabia, Irán, Irak, Palestina, Afganistán, Siria, Turquía, China, ahora Europa, etc. Parecen países destinados a sufrir permanentes situaciones de violencia, pero su denominador común es el hecho de estar geográficamente ubicados entre ambos Trópicos, de Cáncer y de Capricornio, es decir, las zonas de mayor temperatura del globo.
Estos enfrentamientos no son casuales; están auspiciados por potencias mundiales que se ponen a prueba demostrando su poderío armamentista en zonas limitadas. Se trata de una Tercera Guerra Mundial disfrazada, pero localizada, no global, para no destruir las otras zonas ricas en recursos, reservadas para un futuro dominio.
Esto se basa en el mismo principio de los Juegos Olímpicos: generar un enfrentamiento restringido para comparar quién tiene mayor poderío y evitar el derramamiento de más sangre y la destrucción del territorio habitable. Pero poniendo en evidencia la superioridad que cada uno ostenta, midiéndose en cuanto a sus capacidades y características físicas. Un mejor atleta equivaldría entonces a un mejor soldado, como paralelismo.
Por otra parte, tras los conflictos armados hay un interés económico dado que se trata generalmente de zonas muy ricas en petróleo y quien domina el área es el que se lleva el producto o bien, tiene injerencia sobre su comercialización y su precio; en otras palabras, hay mucho dinero de por medio, asunto fácilmente comprensible.
También, así se genera un campo de pruebas de armamento y de utilización de arsenales ya semi-obsoletos, para aprender cómo diseñar mejores armas y reemplazar las antiguas por otras de nueva generación. Los explosivos y los proyectiles tienen fecha de vencimiento y es necesario encontrar donde utilizarlos, para que las industrias de su fabricación y los negociados de venta se mantengan en movimiento.
Es llamativo que a veces, ambos bandos enfrentados empleen armas suministradas por los mismos fabricantes, que hacen su negocio a dos bandas. Una vez profundizado el conflicto, cada bando necesitará más armamento y deberá comprarlo, entregando fuentes de recursos y riquezas a cambio, ya que necesita defenderse y contra-atacar para sobrevivir al conflicto.
Esto originará una fuente continua de recursos y dinero que se destinará a la financiación de los mecanismos de tráfico de droga, que a su vez multiplicará los ingresos exponencialmente en dinero negro que se empleará en las costosas construcciones subterráneas y su mantenimiento, que necesitan los ET que habitan bajo la superficie.
Éstos devuelven “los favores” mediante el aporte de tecnología, que a su vez, será aplicada al armamento. Negocio redondo. De esta manera, los poderosos utilizan la sangre de militantes y guerreros para sustentar sus ingresos y además controlar el aumento de la población mundial.
Por ejemplo, en la “Operación Tormenta del Desierto” EEUU utilizó sus Lockheed F-117 Nighthawk (invisibles para los radares de los atacados) atacando de noche a blancos ya programados.
Esto, siendo que hacía ya casi 15 años que su tecnología estaba secretamente disposible, pero esperando probarlos en un conflicto bélico tanto para ser puestos en combate, como testeados y a su vez, posteriormente declarados fuera de uso para así poder obtener fondos autorizados por el Congreso para incorporar nueva tecnología a su armamento, por supuesto facilitada por los ET de sus bases subterráneas.
Pero además, hay otras razones que no son tan visibles a simple vista y algunas que no son visibles en absoluto. Hay una razón de tipo espiritual y otra de origen ET. Voy a comenzar con la segunda, el porqué hay tanto interés ET en estas áreas y luego se comprenderá el motivo espiritual.
La raza ET dominante en la Tierra, a través de millones de años de evolución, ha logrado controlar un fenómeno alquimista que es manejado naturalmente por los seres Elementales del planeta, desde tiempos en que aún el hombre no había sido sembrado sobre la tierra.
Es decir, aquellas Tribus de criaturas Elementales, sobre todo de Elemento Agua, saben cómo apresar el alma de aquellos individuos que caen bajo su control, impidiendo así que el alma retorne a su Fuente original según el mecanismo natural cuando el individuo “muere” o sea, cuando el alma es liberada de su “envase” material.
El apresamiento de almas se resuelve mucho más fácil en los instantes del nacimiento y de la transición (muerte) de la persona, sobre todo si no está custodiada por Entidades Espirituales de alta Vibración. Esto significa que la persona materialista y no creyente en absoluto es víctima mucho más fácil que aquel que ha mantenido contacto con la espiritualidad y con Entidades Luminosas durante su tránsito por esta tierra.
¿Que sucede con el alma de estos ET que no se reproducen como los mamíferos, porque no poseen aparato reproductor, es decir, no tienen hijos, aunque sí mueren? Uno se pregunta entonces… ¿Cómo subsisten sin descendientes? ¿Cómo nacen? Nunca se ha encontrado ni se encontrará un ET niño (salvo en sus laboratorios, como feto, pero sin vida conciente); siempre se hallan adultos, que parecen tener la misma edad, pero nunca criaturas menores.
Ellos poseen la capacidad de re-encaminar el alma, cuando su materia física ya no responde adecuadamente o bien, sufren algún tipo de accidente (lo que nosotros llamaríamos “morir”) y esa misma alma es “re-instalada” en otro cuerpo que ya está preparado para recibirla y que se ha obtenido por la clonación de células del primero.
Filosóficamente, esto implica que para ellos, matar no es un hecho grave y no lleva mayores consecuencias más allá de la interferencia en el Plan de Vida de la persona, que tampoco les interesa, tal como a un humano no le interesan las razones de existencia de un vacuno o de una gallina a quienes mata para comer.
De esta manera, conservan todos sus conocimientos y experiencias intactas y no necesitan perder tiempo en la niñez, la adolescencia y la juventud en adquirir nuevos conocimientos (que ya fueron aprendidos antes) como nosotros. Simplemente, se cambian a otro cuerpo conservando sus conocimientos y sus capacidades.
Por un lado, necesitan cuerpos de seres humanos, que son fácilmente recuperables de entre medio de los conflictos armados, en los cuales es muy difícil para los humanos diferenciar desaparecidos y su causa, y llevar el recuento de los mismos.
Estos humanos capturados sirven tanto para su experimentación de hibridación mediante la manipulación del ADN, como para sustento mediante la recuperación de su sangre y su suero, que son utilizados como su alimento.
Por otro lado, las almas humanas capturadas les permiten experimentación sin mayores complicaciones. Y entonces uno se preguntará… ¿Y por qué almas de esta zona del planeta con preferencia a otras almas de otras latitudes? La razón es sencilla, aunque poco conocida.
Posiblemente el lector ya sepa que no todas las personas tienen el mismo grado de evolución en su alma. Hay quienes son almas viejas, es decir, seres que han encarnado unas cuantas veces en este planeta, fácilmente detectables a simple vista por sus potenciales distribuidos en su Carta Natal, así como sus diagramas Kármicos y sus esquemas geométricos de Aspectos Planetarios.
Estas almas avanzadas también se pueden reconocer exteriormente por su estabilidad emocional, inteligencia y sabiduría, sus capacidades de amplio espectro y su maduración identificable desde pequeños. Éstas no son las almas preferidas por ellos, sino que siempre buscan almas simples y poco evolucionadas.
Las almas más evolucionadas son los “niños adultos” que observamos con facilidades innatas por la música, el arte, el razonamiento, la capacidad intelectual, la determinación de su carácter, su autoridad que parecen imponer con la mirada y su natural expresividad y capacidad de mando o de liderazgo que suelen poner en evidencia cuando se encuentran en la escuela, entre sus pares o también, entre los adultos, a quienes tratan como viejos conocidos sin importarles las diferencias de edad.
Esas almas viejas, ya consolidadas con esta “realidad” no son fácilmente manejables y tampoco suelen ser afectadas totalmente por los métodos de “borrado de memoria” hipnóticos que utilizan estos ET para retirar de la memoria conciente los recuerdos de casos de encuentros del primer tipo, abducciones y experimentación a las que hayan sido sometidas estas personas en sus naves o en sus laboratorios (extracción de semen y óvulos para gestación de híbridos, células para obtención de ADN, implantación de chips, etc).
¿Qué necesitan entonces? Almas “nuevas”. Aquellas almas que llegan al planeta sin mayores experiencias ni recuerdos de numerosas vidas anteriores. Material “limpio” lo más virginal posible. Que no tienen demasiadas precauciones, pero sí ansiedad de experiencias y gran energía y empuje debido a su juventud en este plano.
Hay que aclarar que si bien la conciencia no recuerda del todo, queda grabada en cada alma la experiencia vivida en cada encarnación y los conocimientos aprendidos a través de sucesivas encarnaciones en este plano.
Estos conocimientos y aprendizajes quedan memorizados en sus Registros Akáshicos y son fácilmente accesibles y revivibles mediante Lecturas de Registros o bien, por Regresiones en trance hipnótico. Los ET buscan que no quede registro alguno en lo posible de sus actividades porque desean pasar lo más desapercibidos que sea posible ante la humanidad.
Surge entonces ahora la pregunta: ¿Por qué las almas “nuevas” encarnan en zonas tropicales preferentemente? Éstas son las almas que prefieren encarnar en lo posible en zonas donde la multitud de experiencias les permitan aprender en poco tiempo, una gran cantidad de vivencias. Su carácter sumamente activo a veces tiende a preferir actitudes agresivas, violentas y de alto contenido energético. ¿Qué mejor entonces que una zona de guerra?
Las almas nuevas se perciben desde el exterior cuando se ve que la persona es elemental, impulsiva, no es del todo estable ni reflexiva, posee una gran vitalidad y energía y necesita la aventura y la acción a fin de acumular experiencias. Esto se ve graficado por la agrupación de planetas en la distribución de su Carta Natal y en la simplicidad de aspectos combinados entre puntos energéticos.
Sin embargo, también en estas zonas tropicales suelen encarnar algunas energías muy antiguas que traen la misión de encaminar y servir de guía a estas almas nuevas, como apoyo espiritual, en un terreno de permanente conflicto bélico. Se comportan así como “Faros de luz” entre la oscuridad de la violencia y de la muerte.
En estas zonas, encarnó el Maestro Jesús, justamente, porque Él también necesitaba rodearse de almas nuevas que tuvieran la energía como para interesarse y participar en Su Doctrina. Jesús, como Luz, se arrojó entre las tinieblas para servir como Guía en el despertar del ser humano.
Jesús nació como un Ser Híbrido gestado entre humanos (María, como mujer virgen) y una raza ET altamente evolucionada y espiritual, mediante un proceso muy habitual practicado por los ET llamado “Impregnación”, que debido a los avances genéticos desarrollados por los ET ya ha quedado en desuso en la actualidad. Del mismo modo gestaban desde las naves a los faraones del Antiguo Egipto; de allí ciertas deformidades y poderes “sobrenaturales” que tenían.
Como se ve, todo cierra, todo concuerda, tanto intereses humanos como ET aunque sean distintos. Todo tiene su razón, aunque a veces no lo comprendamos. No existen las “casualidades” aunque sí existan las coincidencias.
Como decía el autor inglés Ian Fleming, en su libro sobre “James Bond, el agente secreto 007”: “La primera vez es un hecho, una circunstancia (happenstance), la segunda es una coincidencia (coincidence); la tercera, es acción enemiga (enemy action)”, nada más cierto que eso. Ahora, luego de esta lectura, tienes todos los elementos para comprender por qué los conflictos armados parecen no tener fin en las zonas tropicales. Y porqué difícilmente algún día lo tengan.
El Sendero Del Ser. Bendiciones. Leo