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La oposición siria acoge con prudencia el acuerdo de tregua firmado entre Rusia y EE.UU., que podría desembocar en una campaña militar conjunta en Siria.
«Saludamos este acuerdo, si es que va a ser aplicado», ha señalado este sábado Bassma Kodmani, integrante del Alto Comité de Negociaciones (ACN), que reúne a los principales grupos de la oposición siria.
Por ello llama a las autoridad rusas a presionar al Gobierno del presidente de Siria, Bashar al-Asad, para que coopere en la aplicación de esta tregua.
Saludamos este acuerdo, si es que va a ser aplicado», según ha indicado Bassma Kodmani, integrante del Alto Comité de Negociaciones (ACN), que reúne a los principales grupos de la oposición siria.
¿Cuáles son los detalles del acuerdo?
Según este acuerdo, firmado el viernes en Ginebra entre el secretario del Departamento de Estado de EE.UU., John Kerry, y el canciller de Rusia, Serguei Lavrov, la tregua deberá empezar el próximo lunes, y si logra mantenerse una semana, abrirá las vías de una cooperación militar entre las dos potencias y de ataques aéreos coordinados contra las «terroristas” del EIIL (Daesh en árabe).
«Si el acuerdo sobre el alto el fuego en Siria se acata, Rusia y Estados Unidos continuarán trabajando para efectuar ataques contra los terroristas», según indicó el viernes Kerry en una rueda de prensa.
Además, ambos países deben intentar reducir la violencia en ese país árabe y garantizar la llegada de ayudas humanitarias a las regiones en crisis.
El Gobierno sirio tampoco debe realizar misiones de combate sobre las posiciones de los grupos definidos en el documento como “oposición moderada”, según el jefe de la diplomacia estadounidense.
También se ha acordado crear una zona especial en Siria donde solo actuarán las Fuerzas Aéreas de Rusia y Estados Unidos.
Todas las partes del conflicto deben dejar paso a las ayudas para la ciudad siria Alepo y crear una zona desmilitarizada en torno a dicha ciudad, según reclamó el canciller estadounidense.
Del mismo modo, Kerry confirmó que el Frente Fath al-Sham (anteriormente conocido como el Frente Al-Nusra) figura junto con el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) en la lista de organizaciones terroristas, y por tanto será objetivo de la campaña conjunta de bombardeos de EE.UU. y Rusia.
El canciller ruso, por su parte, acogió con interés la disposición de Washington a luchar contra el Frente Al-Sham, pues muestra que “EE.UU. no tiene intención de utilizarlo para luchar contra Damasco”.
Además, de acuerdo con este nuevo plan de paz, para diferenciar a la oposición siria de los terroristas de Daesh, se creará un centro especial con expertos tanto rusos como estadounidenses.
«El objetivo de diferenciar a la oposición de los terroristas es un punto clave del acuerdo de hoy», señaló Lavrov, para luego anunciar el logro de un plan de paz para Siria.
El cierre del plan se produjo tras una reunión de más 12 horas en Ginebra, en un nuevo intento para acabar con un conflicto que ha dejado cientos de miles de muertos y millones de desplazados hacia El Líbano, Turquía y la Unión Europea.
Desde el inicio de la crisis siria en 2011 y el aumento de las actividades de los grupos terroristas en Siria, dicho país ha sido en innumerables ocasiones escenario de atentados y ataques mortales.
Hasta el momento, los múltiples intentos para zanjar dicha crisis no han dado resultados.
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