California ha dado paso a la iniciativa que pondría fin a la venta de coches de gasolina y diésel. La propuesta de ley Clean Cars 2040, presentada este jueves 4 de enero por el asambleísta Phil Ting, tiene como objetivo que todos los vehículos que se compren a partir del 1 de enero de 2040 sean de cero emisiones.
«Estamos en un punto de inflexión: tenemos que abordar las emisiones nocivas que causan el cambio climático», apuntó Phil Ting en la presentación de la ley que prohibiría la venta de coches de combustión interna dentro de 22 años. Con esta iniciativa, el estado pretende reducir en 2050 las emisiones de gases de efecto invernadero en un 80% respecto a los niveles de 1990.
Los vehículos comerciales grandes, considerados de más de 4.000 kilogramos, y los coches de personas que se mudan a California desde otros estados estarían exentos de cumplir las condiciones de esta ley.
Clean Cars 2040 todavía debe ser aprobada y ponerse en vigor, pero forma parte de los esfuerzos del estado por luchar contra el cambio climático e innovar en el sector de los vehículos híbridos y eléctricos. La medida de Phil Ting se une a la del gobernador, Jerry Brown, quien anunció su intención de aumentar el número de vehículos de cero emisiones en las carreteras de California a 1.5 millones para 2025.
Brown sigue luchando contra el cambio climático a través de estas medidas, con las que pone de relieve su rechazo a las políticas de Donald Trump. Después de que el presidente de Estados Unidos retirara al país del Acuerdo de París, el gobernador centró sus esfuerzos en que San Francisco fuera la sede de la Cumbre Mundial sobre Acción Climática en septiembre de 2018.
Por otro lado, California está siguiendo muy de cerca los avances en vehículos autónomos y, el pasado mes de noviembre, el Departamento de Vehículos Motorizados del estado autorizó a Lyft, el mayor competidor de Uber en Estados Unidos, para probar sus coches sin conductor.
La ley propuesta este 4 de enero abre la puerta a una regulación que, en el caso de aprobarse, puede ser replicada en otros estados del país. Hasta ahora, París y, Reino Unido han sido los primeros en poner una fecha para que los automóviles de combustión dejen de circular en las calles.