El Black Friday -o viernes negro- se está imponiendo a nivel mundial como una compulsiva actividad humana pero, ¿qué simbolismo esconde este día?
Como cada viernes después de Acción de Gracias -en EE.UU.- las tiendas de todo el mundo ofrecen descuentos en sus productos. Bienvenidos al Black Friday.
Es una especie de rebajas de un día de duración -aunque los comercios cada año lo amplían para seguir ofreciendo sus ofertas más días- que tuvo sus orígenes en Estados Unidos.
Y así, como cada Black Friday, las redes sociales vuelven a llenarse de mensajes que relacionan el nacimiento de este día de descuentos con la antigua venta de esclavos negros.
Algunos usuarios de las redes sociales han argumentado que el nombre de este día proviene de que el día después de Acción de Gracias los comerciantes de esclavos los vendían con descuentos.
Incluso se ha llegado a afirmar que esta tradición está directamente relacionada con el inicio de la esclavitud. La realidad no tienen nada que ver. El término Black Friday -viernes negro- hacía referencia a la crisis de la Bolsa de Valores del siglo 19.
Aunque hoy se asocie al mayor día de compras en Estados Unidos, el término “viernes negro” se refería originalmente a situaciones muy diferentes.
“El adjetivo ‘negro’ se usó durante muchos siglos para retratar diversos tipos de calamidades”, explica el lingüista Benjamin Zimmer, editor ejecutivo del sitio web vocabulary.com.
En Estados Unidos, la primera vez que se usó el término fue el 24 de septiembre de 1860, cuando Jay Gould y James Fisk intentaron tomar el mercado del oro en la Bolsa de Valores de Nueva York.
Cuando el gobierno fue obligado a intervenir para corregir la distorsión mediante el aumento de la oferta de la materia prima en el mercado, los precios cayeron y muchos inversores perdieron grandes fortunas.
Si observamos detenidamente el Black Friday de nuestra época, parece que se observa una orgía navideña basada en todo lo relacionado con lo irracional..
Un día que fue creado para los adultos y que durante esa “celebración”, sacan algunas características oscuras de ellos, competitividad, egoísmo, incluso violencia verbal y agresión física a otras personas.
Nuestras mentes son consumidas por el materialismo pero no logramos detenernos a pensar en las repercusiones de este tipo de “moda” que si bien se vive de manera moderada, sí se experimenta agresivamente en EE.UU.