Internet está lleno de información nuestra. Lo peor de todo es que somos nosotros los que estamos publicando esa información, y en el caso de que tengamos cuentas de redes sociales como Twitter o Instagram abiertas, cualquier persona puede ver nuestras fotos o ver nuestros tweets. Y el FBI lo está aprovechando para identificar a personas.
Clearview AI: base de datos de 3.000 millones de fotos
Así, la agencia no sólo afirma poder desbloquear hasta el iPhone más moderno, sino que también puede conocer el nombre, la dirección, y otros detalles de cualquier persona con sólo tener una foto suya. Para ello, utilizan un software desarrollador por Clearview AI, con un avanzado sistema de reconocimiento facial.
Y no sólo el FBI lo está usando, sino todas las autoridades relacionadas con la seguridad en Estados Unidos. Lo que hace el software es buscar por todo Internet información relacionada con esa cara que ha fotografiado, incluyendo redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram, YouTube, Venmo, y muchas otras, a pesar de que redes como Twitter prohíben el uso de sus imágenes para mejorar el reconocimiento facial. Con ello, casi seguro que obtendrá nuestro nombre, y a partir de ahí pueden cruzar otras fuentes de datos para encontrar la dirección o el número de teléfono si no los encuentran en redes.
Clearview AI cuenta con una base de datos de 3.000 millones de fotos, siendo ese uno de los motivos que les llevó a utilizar la base de datos de la empresa. Por el contrario, la base de datos del FBI “sólo” cuenta con casi 650 millones, obtenidas a través de pasaportes o carnets de conducir. De momento ya hay más de 600 agencias en Estados Unidos que la usan. El primer crimen que resolvieron fue de una pelea de dos hombres en un parque, donde el programa identificó la cara de uno de los hombres en otro vídeo en el que se enlazaba a su perfil en la red social. Ese hombre no aparecía en las bases de datos en Estados Unidos, por lo que habría sido muy difícil arrestarle sin la IA.
Así, la policía o el FBI pueden coger cualquier foto de un sospechoso de cualquier tipo de crimen, desde terrorismo hasta el robo de una tienda, e identificar a la persona con relativa facilidad. Las autoridades no saben todos los detalles de cómo funciona el programa, pero ya se ha usado para arrestar a gente relacionada con robos en tiendas, robo de identidad, fraude de tarjetas bancarias, asesinatos y casos de abuso sexual.
La UE y Google han parado el desarrollo de esta tecnología
Mientras, en la Unión Europea, todo software relacionado con el reconocimiento facial ha sido prohibido durante un periodo de cinco años para dar tiempo a que se cree una regulación que permita evitar abusos en el futuro de este tipo de tecnología, ya que si cae en las manos equivocadas puede generar muchísimos problemas.
De hecho, la propia Google afirmó en 2011 que la única tecnología en la que habían decidido no avanzar era el reconocimiento facial porque en el futuro podría usarse para todo tipo de actividades maliciosas.
El New York Times, que es quien ha revelado la existencia de este software, ha podido asomarse a su código para descubrir también que está preparado para poderse usar con gafas de realidad aumentada, de manera que podría identificarse a cualquier persona que se vea en la calle como si del juego Watchdogs se tratase. El periodista comprobó además cómo la empresa podía acceder a esos datos, y lo usaron para monitorearle.
Esto es realmente peligroso, ya que puede usarse para identificar a personas en protestas tal y como está ocurriendo en Hong Kong. Los peligros pueden ir aún más lejos, como un policía que quiera conocer el pasado de una posible nueva pareja, o que gobiernos lo usen para chantajear a personas. Sin embargo, como bien dice la empresa, es difícil parar el avance tecnológico a pesar de que esta tecnología pueda usarse para identificar a cualquier persona.
Actualmente tienen una tasa de acierto del 75% con las fotos que la policía y otras agencias suben al servicio, aunque la tasa dicen que sería mayor si las cámaras de seguridad estuvieran a la altura de los ojos, que es donde la mayoría de fotos se toman. La IA puede también identificar a personas de lado o que tengan parte de la cara tapada, pero tiene algunas dificultados para la vista desde arriba.