El espacio tiene poder. O bien vibra contigo, o no. Construir un altar sagrado para meditar es una manera de cambiar la vibración de un lugar. Como todo en la vida, los espacios que nos rodean están llenos de energía. ¿Alguna vez has entrado en una sala con personas y has sentido la energía para acabar pesado, estresado o debil?… Por el contrario, podrías haber entrado en un templo o en una capilla religiosa y haber sentido la esperanza, la alabanza o la reverencia.
Intuitivamente, y muchas veces sin darnos cuenta, sentimos que todo es energía y que todo vibra a una cierta frecuencia. Mientras que algunas vibraciones son pesadas y densas (se asocian con emociones negativas como la ansiedad y el odio), otras vibraciones son ligeras y aireadas (se asocian con emociones positivas como el amor y la gratitud ). Incluso aunque no estemos conscientes de ello, la energía que nos rodea nos impacta sutilmente a nivel físico, mental, emocional y etérico.
El espacio te apoya y te da poder, o mina y rebaja tu energía. En otras palabras, si la energía de un lugar respalda la idea de lo sagrado, a la persona en esa habitación le resultará mucho más fácil resonar con su interior. Sabiendo esto, es fácil ver por qué es importante crear su propio espacio sagrado.
Los espacios sagrados nos hacen sentir cómodos, bienvenidos, apoyados y amados. Los espacios sagrados también son contenedores vitales de intención y acción positiva. Si deseas establecer una práctica espiritual regular y crear tu propio espacio sagrado, la mejor manera de comenzar (en mi opinión) es construir un altar sagrado.
Esta guía te proporcionará instrucciones simples pero útiles sobre cómo construir tu propio altar para la meditación, el trabajo interno o la práctica espiritual general. Puedes seguirlo o elegir qué información necesita más.
¿Qué es un altar?
Un altar es cualquier estructura en la que se realizan ofrendas espirituales / religiosas, oraciones o rituales. La raíz de la palabra altar significa “lugar alto” que refleja que simbólicamente sagrado e importante es en la práctica espiritual. Los altares pueden construirse con materiales artificiales o naturales y existen en casi todas las religiones y culturas.
En el sentido espiritual, esotérico y metafísico, los altares se pueden usar para la meditación, el ritual, la oración, la reflexión, la gratitud o cualquier otra forma de trabajo interno. Al construir un altar sagrado espiritual, este puede ser pequeño o grande, elegante o minimalista, tradicional o no tradicional. La apariencia de tu altar dependerá de ti y de tus propios gustos y preferencias. Lo más importante, es esencial que tu altar se vea y se sienta auténtico para tus necesidades únicas.
Cómo construir un altar sagrado para la meditación y tu práctica espiritual
No importa qué estilo de espiritualidad te guste más, construir un altar sagrado proporcionará un poderoso punto focal para tu energía. Quizás, antes de construir un altar sagrado para meditar necesites eliminar algún tipo de energía estancada que haya en el lugar. Lee nuestro anterior artículo de como eliminar la energía estancada.
Los beneficios de construir un altar sagrado incluyen:
- Tener una expresión física de tu compromiso personal o deseo.
- Tener una lugar de expresión y herramientas para mejorar tu práctica espiritual
- Disfrutar de un espacio sagrado dedicado a tu espiritualidad.
- Hacer de tus necesidades espirituales más profundas, un centro físico y actualizado de tu vida.
- Ganar un ‘centro espiritual’ en tu vida al que puedas volver todos los días.
- Tener una fuente de energía positiva que llene tu hogar.
- Sentir una sensación de empoderamiento a través de la autoexpresión (es decir, construir y mantener un altar)
Ya sea que decidas construir un altar sagrado para la meditación, para las creencias religiosas, la práctica pagana o simplemente para promover tu trabajo interno, aquí hay una guía paso a paso simple:
Paso 1. Elija un lugar que se vea o sientas como “correcto”
Si tienes una habitación libre, puedes dedicarla a construir un altar sagrado. Pero no todos tenemos ese lujo. Si tienes muy poco espacio en tu casa, puedes considerar un rincón o un lugar tranquilo que te brinde privacidad. He visto hermosos altares en dormitorios, salones, oficinas e incluso armarios. Cuando busques un lugar, hazte las siguientes preguntas:
- ¿Este lugar parece apropiado?
- ¿Se siente este lugar “correcto”?
- ¿Tengo privacidad aquí?
- ¿Es este lugar tranquilo?
- ¿La energía y vibración es intranquila, estresada o pesada aquí?
- ¿Puedo construir un altar sagrado aquí sin interrumpir o molestar a nadie más?
Debido a restricciones de espacio o simple preferencias, es posible que desees construir un altar sagrado “pequeño”. Los pequeños altares pueden ser de hasta las dimensiones de un plato. Algunas personas incluso prefieren mantener sus altares portátiles en un frasco. Haz lo que sientas más cómodo para tus necesidades y tu contexto de vida actual.
Paso 2. Limpia el espacio
El acto de vaciar y limpiar el espacio ha sido practicado por los chamanes durante miles de años.
¿Por qué no seguir los pasos de estos chamanes y limpiar cualquier residuo energético de la habitación hasta que se vea o se sienta “correcta” para ti?… Asegúrate de tener en mente la intención de “Estoy limpiando este espacio” mientras realiza este proceso. Un espacio energéticamente limpio debe sentirse claro, ligero y amigable.
Para limpiar el espacio enérgicamente, puedes usar sonidos (como usar un cuenco tibetano), aromas (Incienso), luz (Encender una vela o abrir las ventanas y dejar que entre el sol), visualización , o incluso un simple hecho como barrer la habitación.
Si el espacio se siente energéticamente como sin conexión a tierra, es posible que desees utilizar un tambor o una piedra terrosa como la turmalina negra para conectar con la energía de la tierra.
Paso 3. Comience a reunir objetos que sean significativos para ti
Cuando se trata de construir un altar sagrado, realmente no hay reglas. La práctica es tan personal que es imperativo escuchar a tu corazón.
Sin embargo, como guía general, aquí hay algunas cosas que las personas tienden a incluir en sus altares:
- Objetos que representan los guías espirituales de cada uno
- Objetos que representan a nuestro maestro espiritual
- Cosas que reflejan yin / yang, luz / oscuridad, masculino / femenino
- Objetos que representan el cuerpo, la mente, el corazón, el alma y el espíritu
- Objetos que representan los elementos de fuego, agua, tierra, aire y éter
- Cosas que representan cualidades que uno más desea encarnar (por ejemplo, libertad, amor)
- Objetos que representan al niño interno o maestro interno
- Cosas que representan el ciclo de vida, muerte y transformación
- Objetos que amplifican energía (p. ej. cristales, campanillas)
- Cualquier otro objeto que sea inspirador, poderoso o útil
Más específicamente, los objetos que puede desear poner al construir un altar sagrado podría incluir:
- Velas
- Estatuas
- Plumas
- Piedras
- Cristales
- Soportes decorativos
- Citas inspiradoras
- Un diario
- Notas escritas
- Libros de oraciones
- Rosarios
- Calaveras o huesos
- Plantas vivas
- Agua
- Conchas
- Pétalos de flores
- Símbolos
- Arena
- Sal
- Fotos
- Oráculo o cartas del tarot
- Guijarros
- Aceites esenciales
Realmente, puedes incluir en tu altar todo lo que desees. Solo asegúrate de diseñarlo de la manera que te gustaría, no de la forma en que crees que “debería” verse.
Al elegir objetos para su espacio sagrado, tenga en cuenta las siguientes preguntas:
- ¿Para qué se usaré mi altar y cuál es el propósito?
- ¿Qué quiero reflejar o expresar a través del altar?
- ¿Mi altar tiene un tema o es espontáneo?
Las respuestas a las preguntas anteriores te ayudarán a decidir qué objetos elegir.
Paso 4. Organiza tu altar
Una vez que hayas encontrado tu espacio sagrado, lo hayas limpiado y tengas una idea clara de qué objetos incluir, deberás organizar tu altar.
Eres libre de organizar el altar de la forma que desees, pero idealmente, trata de organizarlo de una manera simétrica.
¿Por qué es mejor organizar un altar simétricamente?… La simetría refleja la energía del equilibrio y la integridad, algo a lo que definitivamente quieres dar la bienvenida en tu espacio sagrado. Si tu altar está abarrotado y desequilibrado, es posible que te distraiga o te resulte difícil trabajar con él.
Piense en un mandala: el lado izquierdo y el derecho son imágenes armoniosas de espejo entre sí. Si bien tu altar no necesita ser tan preciso, puedes usar la imagen de un mandala para ayudarte.
Dependiendo de tu propósito, tu altar podría beneficiarse de tener una pieza central o punto focal. El punto focal de tu altar está justo en el medio y es el lugar donde tus ojos se centran más. Tu punto focal podría ser cualquier cosa: una estatua de una deidad o un animal espiritual, un jarrón con flores frescas, una foto de un ser iluminado o incluso una gran vela encendida. ¡Tu decides!
Paso 5. Mantén tu altar
Mantener el altar limpio de telarañas, polvo y otros residuos es importante: muestra respeto por tu práctica. Después de todo, se supone que es tu espacio sagrado. Haz esto tan regularmente como lo sientas necesario.
Finalmente, recuerda que tu altar no siempre necesita permanecer igual. Eres libre de cambiarlo, ajustarlo, agregarle cosas o quitarle cuando lo desees. A medida que tu trabajo interno se desarrolla, es posible que ciertos elementos de tu altar ya no sean relevantes o necesarios para ti. De la misma manera, puedes comenzar a sentir que falta algo en tu altar y, por lo tanto, deberás ajustarlo de la misma manera.
Como siempre, permite que tu altar sagrado sea un lugar físico en el que puedas sentarte en silencio, reflexionar, quedarte quieto, comunicarte con tu Espíritu, agradecer a tus guías, mostrar gratitud y cualquier otra necesidad profunda que tengas. Tu espacio sagrado es tuyo para construir, alterar, nutrir y apreciar todos los días. Es uno de los regalos más preciosos que puedes darte a ti mismo.
Recuerda, tu altar es tu lugar de trabajo espiritual; tu espacio físico de poder. No necesitas gastar mucho dinero para construir un altar sagrado que sea significativo para ti. Mira alrededor de tu casa, en el mundo natural que la rodea o en una tienda de segunda mano local para encontrar objetos especiales y significativos. Y finalmente, cuídalo y pasa un tiempo regularmente con él. ¡Tu altar es completamente tuyo para darle forma, construir y transformar!