Mente Zen, mente de principiante es el trabajo fundamental del fundador del Centro Zen de San Francisco, Shunryu Suzuki Roshi. Solo en este capítulo explica: cómo practicar za-zen, la diferencia entre la gran mente y la pequeña mente y la verdadera naturaleza del pensamiento.
Cuando practiques zazen, no trates de detener tus pensamientos. Deja que se detengan por sí mismos. Si algo viene a tu mente, deja que venga y deja que se vaya. No se quedará mucho tiempo. Si tratas de detener los pensamientos, eso significa que te molestan. No dejes que nada te moleste. Parece como si algo viniera de fuera de tu mente, pero en realidad sólo son las olas de esa mente, y si no dejas que te molesten, se irán calmando gradualmente. En cinco, o a lo sumo diez minutos, tu mente estará completamente calmada y serena. Y entonces tu respiración será muy lenta, mientras que tu pulso se habrá acelerado un poco.
Hará falta bastante tiempo para que tu mente llegue a estar calmada y serena durante tu práctica. Añoran muchas sensaciones, surgen muchos pensamientos o imágenes, pero sólo son las olas de tu propia mente. Nada procede de fuera de tu mente. Generalmente pensamos que a nuestra mente le llegan las impresiones y experiencias de fuera, pero esta comprensión de nuestra mente no es verdadera. La verdadera comprensión es que la mente lo incluye todo; cuando piensas que algo viene de fuera, eso sólo significa que algo aparece en tu mente. Nada externo puede causarte ningún problema. Tú mismo generas las olas en tu mente. Si la dejas tal como es, tu mente se calmará. A esta mente se la llama gran mente.
Si tu mente se relaciona con algo externo a si misma, esa es la pequeña mente, una mente limitada. Si tu mente no se relaciona con nada más, entonces en la actividad de tu mente no hay entendimiento dualista. Entiendes que la actividad sólo son las olas de tu mente. La gran mente lo experimenta todo dentro de sí misma. ¿Entiendes la diferencia entre las dos mentes: la mente que lo incluye todo y la mente que está relacionada con algo?» En realidad son lo mismo, pero la comprensión es diferente, y tu actitud hacia tu propia vida será diferente en función de tu comprensión.
La esencia de la mente es que todo está dentro de tu mente. Experimentar esto es poseer un sentimiento religioso. Aunque surjan olas, la esencia de tu mente es pura; es sólo como agua clara con unas cuantas olas. En realidad, en el agua siempre hay olas. Las olas son la práctica del agua. Hablar de las olas aparte del agua, o del agua aparte de las olas, es un engaño. El agua y las olas son uno. La gran mente y la pequeña mente son uno. Cuando comprendes tu mente de esta manera, tienes cierta seguridad en lo que sientes. Como tu mente no espera nada de fuera, siempre está llena. Una mente con olas no es una mente alterada, sino que en realidad es una mente amplificada. Cualquier cosa que experimentes es una expresión de la gran mente.
La actividad de la gran mente es amplificarse a si misma a través de diversas experiencias. En cierto sentido, nuestras experiencias vienen de una en una y siempre son nuevas y frescas, pero, en otro sentido, no son sino un despliegue continuo o repetido de la gran mente. Por ejemplo, si tomas algo bueno para desayunar, dirás: «Esto es bueno». Usas la palabra «bueno» porque lo asocias con algo que experimentaste hace algún tiempo, aunque no recuerdes cuándo. En la gran mente aceptamos cada una de nuestras experiencias como si reconociéramos que el rostro que vemos en el espejo fuera nuestro propio rostro. No tenemos miedo de perder esta mente. No hay ningún lugar al que ir o del que venir; no hay miedo a la muerte, no se sufre vejez ni enfermedad. Puesto que experimentamos todos los aspectos de la vida como un despliegue de la gran mente, no nos preocupa tener una alegría excesiva. De modo que mantenemos una calma imperturbable, y con esta calma imperturbable de la gran mente practicamos zazen.
Shunryu Suzuki (1904-1971) fue un monje y maestro Zen y fundador del Centro Zen de San Francisco y del Centro de la montaña Zen Tassajara. Muchas de sus charlas se han recopilado en libros, como el innovador Mente zen, mente de principiante. / Más información