El 11 de febrero inicia el nuevo año chino, que en esta ocasión corresponde al signo del Buey. El ciclo anual astrológico de China comienza con cada Luna Nueva que ocurre en Acuario.
La Luna Nueva acuariana del 11 de febrero ocurrirá a las 3:07 de la tarde, hora de Venezuela (19:07 hora universal, y en China, por la diferencia horaria, el año empezará el 12 de febrero a las 3:07 de la madrugada).
En esta ocasión, el inicio de este nuevo año astrológico que se da de acuerdo a la tradición china, tendrá energías muy especiales y fuera de lo común.
Esto es así, porque la Luna Nueva acuariana se dará junto a un “stellium”, eso significa una gran cantidad de planetas que coinciden en un mismo signo, en este caso Acuario.
El Sol y la Luna al unirse, forman la Luna Nueva, y con ellos en Acuario, también estarán Júpiter, Saturno, Venus, y Mercurio, que se encuentra en su fase retrógrada; en total, seis planetas coinciden en la franja zodiacal acuariana, recargando de energías cósmicas al Buey.
Por tanto, el año nuevo chino, el Año del Buey, iniciará con una gran acumulación energética, pero lo más relevante es que, cuando comienza un nuevo ciclo con Mercurio en retroceso, es de esperar que se produzca un viraje, un cambio de rumbo, y aún más si se da en Acuario, signo que favorece la renovación.
El signo del Buey se asocia a la productividad, a la prosperidad, a la actividad económica; su activación en este año, es, por tanto, buen augurio para la economía a nivel mundial, algo muy necesario en estos tiempos de pandemia que ha generado más bien un período de recesión en muchas partes del mundo.
Al iniciarse este año del Buey con Mercurio retrógrado, la influencia del signo toma un cariz bien interesante, porque nos puede conducir a salidas creativas, innovaciones, cambios de rumbo, para reactivar la economía, tanto en lo personal como en lo colectivo.
Esperemos que estas energías se apliquen junto a la tendencia que marca el Buey, para levantar la economía a nivel mundial, con nuevas formas de abordar los problemas, con salidas creativas y renovadoras.
Es relevante el alto nivel energético que se activa en este momento en Acuario, signo que promueve cambios sociales, políticos, económicos y culturales, que favorece la modernización, que genera deseos de libertad y fraternidad, y da apertura a nuevas tendencias en todas las áreas del quehacer humano.
Júpiter y Saturno en Acuario abren caminos a nuevas estructuras, la Luna Nueva (Sol-Luna) da inicio a un importante ciclo energético; Venus, que también transita por la franja acuariana, manifestará sus efectos benéficos en las relaciones human as y la productividad, y Mercurio en su fase retrógrada, nos trae el reto de la creatividad para marcar un nuevo rumbo colectivo.
Es también muy relevante el hecho de que Urano, regente de Acuario, desde Tauro, estará conectado en un ángulo de 90 grados (cuadratura) con Saturno en la franja acuariana, y ello da una fuerte tendencia a romper con viejos moldes y estructuras, así que el impulso renovador es avasallador.
Ilustración: Pedro González Rondón
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