La moda rápida (fast fashion) está destruyendo el planeta y los hechos hablan por sí mismos. La industria de la moda es responsable del 10% de las emisiones de carbono globales anuales y del 20% de la producción de aguas residuales en todo el mundo.
Aunque menos del 1% de la ropa se recicla en nuevas prendas, las marcas continúan aumentando el diseño y la producción. Si la industria sigue avanzando al mismo ritmo, la Tierra y sus habitantes seguramente se quedarán sin recursos o se enterrarán en desechos textiles, lo que ocurra primero.
Afortunadamente, los consumidores de hoy están comenzando a exigir cambios. Los compradores están cansados del desperdicio excesivo y del lavado verde y quieren honestidad y moda lenta y sostenible.
Posteriormente, muchas marcas de ropa recurren a la tecnología en busca de ayuda. En 2022, algunas innovaciones podrían hacer que la moda sea más sostenible y aumentar la satisfacción del cliente.
1. Modelos virtuales
Si te gusta la moda, es probable que estés familiarizado con la Semana de la Moda. Este icónico evento se celebra dos veces al año en las cuatro grandes capitales de la moda: Nueva York, Londres, Milán y París. Aquí, editores, compradores y modelos se reúnen para mostrar las últimas tendencias y colecciones más recientes.
Desafortunadamente, estos programas generan toneladas de desperdicio de material, sin mencionar el 37% de las emisiones anuales de carbono a nivel mundial .
Algunos diseñadores están utilizando modelos virtuales para exhibir sus creaciones y contener los desechos. Muchos de estos avatares tienen sus propias cuentas en las redes sociales y una gran cantidad de seguidores en línea, lo que permite a los diseñadores un alcance más amplio que si participaran en desfiles de moda físicos.
Debido a que los modelos CGI usan ropa que en realidad no se ha fabricado, ayudan a reducir el desperdicio de textiles y a conservar de manera efectiva recursos como el agua y la energía.
2. Muestreo digital
El muestreo digital también ha reducido el desperdicio de telas, especialmente durante la pandemia. A medida que los minoristas cerraron sus puertas y los vestidores dejaron de estar disponibles, muchos compradores recurrieron a la compra de piezas en línea.
Hace unos años, esto habría implicado tablas de tallas, medidas inexactas y miles de millones de devoluciones. Ahora, sin embargo, los consumidores pueden utilizar el muestreo digital, una tecnología que le permite probarse la ropa virtualmente, tal como lo haría en una tienda.
Esta innovadora solución ha reducido los costos de producción de cientos de grandes minoristas y diseñadores. Más importante aún, ha reducido la necesidad de crear muestras físicas, lo que ahorra tiempo, energía y recursos al mismo tiempo que disminuye, e incluso elimina, el desperdicio.
3. Aprendizaje automático
Las marcas de moda están remodelando constantemente su enfoque del diseño de productos al predecir lo que los clientes querrán usar a continuación. ¿Cómo saben qué tendencia próxima despertará el interés del público?
Dos palabras: aprendizaje automático.
Esta tecnología recopila datos directamente de los consumidores para determinar qué está de moda y qué no. Luego utiliza la información para pronosticar la demanda, detectar tendencias y ayudar a las marcas a tomar mejores decisiones comerciales.
Cuantos más datos recopilan estos sistemas, más inteligente se vuelve la inteligencia artificial, lo que permite a las marcas administrar el inventario y satisfacer a los clientes sin exceso de existencias ni sobreproducción.
El aprendizaje automático también incorpora algoritmos y big data para adoptar procesos de fabricación y distribución más eficientes. En última instancia, esta tecnología ahorra tiempo, dinero y recursos valiosos como el agua y la energía.
4. Textiles alternativos de moda
¿Están los consumidores realmente interesados en la ropa sostenible? Bueno, si no fuera así, no habría tantos textiles alternativos para elegir. A casi el 60% de las personas de entre 18 y 21 años les importa si los especialistas en marketing ofrecen productos respetuosos con el medio ambiente, lo que significa que las telas ecológicas tienen una gran demanda en estos días.
En respuesta, cientos de marcas han comenzado a implementar materiales como cuero de piña vegano, lino de fibras vegetales de lino y fibras naturales como lyocell y cáñamo.
Los diseñadores conscientes también usan corcho, bambú e incluso algas para hacer ropa ética. Muchos de estos elementos también son biodegradables, por lo que se descompondrán rápidamente si terminan en un vertedero o en un entorno marino.
5. Tecnología de devoluciones
Los retornos solo en los EE. UU. Generan 15 millones de toneladas de emisiones de carbono y 5 mil millones de libras de desechos en vertederos cada año. Al tratar de manera más eficiente el proceso de devolución, la industria de la moda podría aprovechar más las prendas de segunda mano y minimizar el desperdicio.
Afortunadamente, la tecnología de devolución ya lo ha hecho posible para cientos de marcas. Esta innovación utiliza software y algoritmos basados en la nube para desviar las devoluciones de los vertederos y devolverlas a las existencias, los centros de renovación y las organizaciones benéficas.
La inteligencia artificial también puede ayudar a reducir las tasas de retorno. Los consumidores devuelven los artículos por diversas razones, entre las que se incluyen un ajuste inadecuado y tiempos de entrega lentos. Con la ayuda de la IA, las marcas pueden implementar la segmentación de la base de datos de clientes para determinar exactamente por qué y qué compradores regresan.
Esta tecnología descubrirá patrones, comportamientos y características del consumidor para ayudar a los minoristas a tomar decisiones más inteligentes con respecto a la publicidad, el control de calidad y la presentación del producto.
El futuro de la sostenibilidad en la moda
Mientras los consumidores sigan exigiendo moda sostenible, la industria se elevará para cumplir y superar sus expectativas. Sin duda, el futuro de la moda se centrará en el respeto al medio ambiente, desde el diseño hasta la distribución.
Las próximas innovaciones, como el escaneo corporal móvil, permitirán a los consumidores comprar ropa que se ajuste a su tipo de cuerpo y proporciones físicas exactas, lo que reducirá las devoluciones y el desperdicio asociado.
El aprendizaje automático se volverá más inteligente y los macrodatos mejorarán los análisis para que las marcas puedan predecir mejor las tendencias en el diseño y la demanda. Las telas alternativas se volverán más cómodas, más duraderas y más sostenibles, y los nuevos materiales naturales reemplazarán a las fibras sintéticas.
Por April Miller. Artículo en inglés