Muere el traductor de Benedicto XVI AL DÍA SIGUIENTE que el Papa. Giulio Colombi, eminente teólogo e intelectual que hablaba más de seis idiomas ¡oh casualidad! fallece el 1 de enero. ¿A quién hubiera dejado sus escritos el Papa cautivo? Otra casualidad.
Se hace difícil no tener fundadas sospechas. Este sabio teólogo llevaba años con el antiguo Cardenal Ratzinger. Se manejaban en varios idiomas, y si alguien sabía demasiado y tenía las claves de lo que el Papa dejó escrito, era él: sobre todo, el por qué de su renuncia al Papado.
Quien crea que Colombi murió de muerte natural está en otro mundo.
¡Al día siguiente! ¿Para que no le diera tiempo a escapar ni difundir nada?