En Perú, en unas tumbas de más de 2 mil años de antigüedad, hallaron unas enigmáticas piezas de cerámica con forma de humanos, animales, y criaturas extrañas.
Para los arqueólogos, se trataba tan solo de unas vasijas, destinadas a guardar líquidos, sin embargo, años después, los investigadores descubrieron que el sonido que emiten abre la mente de aquellos que lo oyen, y los transportan a otras realidades.