Bielorrusia limita con Rusia, Letonia, Lituania, Polonia y Ucrania, y a partir de ahora sus conexiones de internet, también. La República de Bielorrusia acaba de promulgar una ley que hace ilegal para los ciudadanos y los residentes del país acceder y/o utilizar sitios web extranjeros, especialmente en lo que respecta a los usos comerciales de esos sitios. Quien se pase de largo la ley, incurrirá en un delito menor que se sanciona con multas de hasta 100 euros.
En el punto de mira de la ley están, de forma particular, los locutorios que dan servicios de conexión a la red, que podrían incurrir en un delito si no se preocupan de cortar la conexión al extranjero. Adiós, internet. Hola, intranet. ¡Qué bonito va a ser utilizar la red para ver lo que puedes mirar por la ventana! ¡Qué útil!
La ley aprobada entra en vigor el próximo 6 de enero, y emplaza a empresas y autónomos bielorrusos a utilizar sólo dominios locales como proveedores de sus servicios, ventas o gestión de correo electrónico, lo que se traduce en una pérdida de dominios por parte de aquellos que tuvieran el hosting fuera de las fronteras del país.
¿He oído algo sobre “volver al pasado”? Sí, desde luego la aprobación de leyes como esta, la Sinde o la SOPA son eso: un recorte en toda regla a los avances en la libertad de comunicación que habíamos experimentado durante los últimos años. Tomemos buena nota, por si los vientos totalitarios del aislacionismo llegan hasta nuestros dominios en un futuro próximo.
http://www.nacionred.com/censura/bielorrusia-donde-internet-se-acaba-en-la-frontera