La World Athletics, la Federación Internacional de Atletismo, acordó que los atletas transgénero (hombres que se autoperciben mujeres) no podrán competir en categoría femenina en pruebas internacionales.
El presidente del organismo, Sebastian Coe, declaró las últimas horas que a partir del 31 de marzo no se permitirá participar en competiciones que puntúen para el ranking mundial a ningún atleta transgénero “que haya pasado por la pubertad masculina”, lo que deja abierta una puerta a futuro a aquellos que de niños hayan sido sometidos a hormonizaciones que impiden su normal pubertad.
El titular de la entidad internacional añadió además que la decisión está “guiada por el principio general de proteger la categoría femenina”.
El organismo que rige las normas del atletismo cierra así, por el momento, una de las polémicas que han surgido en los últimos años, ya que “mujeres trans” tenían ostensible ventaja al participar en competiciones femeninas, sobre todo a raíz de que el atleta conocido como Valentina Petrillo, nacido Fabrizio Petrillo, quien a sus 46 comenzó a “autopercibirse mujer” y pasó a batir todos los récords.
Ahora, tras años de polémicas, la World Athletics tomó la determinación de prohibir a los transgénero que participen en competiciones femeninas.
La llamada “perspectiva de género”, en los últimos años, ha venido “evolucionando” hacia los postulados de la Teoría Queer, que define el género a partir de la autopercepción de cada persona. Siendo que esta perspectiva es parte integral de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas, es de esperar que este freno en la competencia atlética sea solo temporal, y para evitar profundizar las polémicas suscitadas. Quizá esto explique que el presidente del organismo, Sebastian Coe, haya dicho sobre la resolución: “No vamos a decir que no para siempre”.