¿Por qué nadie sabe cuántos nigerianos hay en el mundo? Es la pregunta que se hacen cientos de expertos e instituciones internacionales. Nigeria es la nación más poblada de África y, sin embargo, ni siquiera el propio país tiene una aproximación demográfica. Sabemos que tenía más de 140 millones de ciudadanos hace un par de décadas y que se convertirá pronto en la tercera población más grande del mundo, detrás de India y China. Pero esas cifras y la extrapolación se basan en el censo de Nigeria de 2006, uno que probablemente estuviera amañado.
Esta es la historia de un país gigantesco que por falta de recursos, logística y buenas políticas no ha conseguido comprender el tamaño de su población durante décadas.
Desconocimiento total. Los censos son una herramienta muy útil para conocer la situación social y económica de un país. Una manera de mirarse al espejo y comprenderse mejor a sí mismo. Sin embargo, Nigeria no puede hacerlo. De 1866 a 1991, sus censos se vieron afectados por la corrupción, manipulación de estadísticas, falsificación deliberada, interrupciones del conteo por la inestabilidad política, enfrentamientos étnicos y escasez de profesionales para recopilar y gestionar datos.
El resultado es que el país africano sigue tomando como referencia una base de datos obsoleta y fechada en 2006, que fija la población de Nigeria en 140 millones. Una cifra que está lejos de las últimas estimaciones de las Naciones Unidas, que la sitúan muy por encima de los 200 millones de personas, dada su explosión demográfica reciente. De hecho, su tasa de crecimiento actual es del 2,4%, lo que según la ONU la convierte en el cuarto país más poblado actualmente.
Un censo corrupto. Hay que tener en cuenta que en Nigeria, tanto los escaños parlamentarios como los presupuestos del gobierno central se entregan a los estados en función de su población, lo que ha hecho que los políticos acaben inflando las cifras cuando les conviene. Solo hay que mirar el censo de 2006, donde se contaron 9,4 millones de personas en el estado norteño de Kano, en comparación con solo 9 millones en Lagos, la capital comercial. Más tarde, Lagos haría su propio censo, técnicamente ilegal, y obtuvo 17,5 millones.
En 2013 el jefe de la Comisión Nacional de Población (NPC), Festus Odimegwu, defendió que ni el censo de 2006 ni ninguno anterior había sido exacto y renunció poco después.
Investigaciones recientes. No son los únicos organismos que han tratado de obtener datos estadísticos sobre la demografía del país. En 2020, el INE nigeriano dijo que calculaban que eran unos 206 millones de nigerianos, pero ese mismo año el Banco Mundial dijo que 208 millones. Tres años después, señalan que son ya casi 224 millones.
Africapolis, un proyecto de investigación financiado por Francia, también utilizó mapas satelitales para estimar la población de pueblos y ciudades en 2010. Descubrió que varias ciudades, principalmente en el norte, tenían cientos de miles de personas menos que las contadas en el censo de 2006. Pero luego se reveló que los investigadores habían subestimado la urbanización en el delta del Níger, densamente poblado.
¿Por qué no se calcula? Según ha anunciado el gobierno, se ha programado un nuevo censo para este 2023. El problema es que costará 400.000 millones de nairas nigerianas, unos 820 millones de euros. Y eso es mucho dinero para un país tan pobre como Nigeria. Tal y como explican los expertos en este artículo de El Confidencial, gastar una cantidad de dinero tan grande podría desatar protestas en todo el país.
Por otro lado, la logística también representa otro obstáculo. Habría que contratar miles de vehículos y dispositivos electrónicos que el país no puede gestionar, y más teniendo en cuenta que existen zonas de la región controladas por rebeldes y grupos yihadistas donde se producen robos y secuestros a menudo. Y por último, existe otro gran inconveniente: la corrupción política. Como decíamos antes, a los gobernantes les interesa que las cifras sean de una manera para que haya una distribución de fondos determinada. Y eso implica mantener un censo equivocado.
Viene de lejos. Lo cierto es que contar a los nigerianos ha causado polémica desde hace mucho, incluso en su era colonial. Hay que recordar que el país se formó a partir de dos colonias británicas: un sur mayoritariamente cristiano y un norte musulmán. De hecho, antes de la independencia en 960, los británicos fueron acusados por los sureños de fabricar una mayoría en el norte. En 1962, las cifras del censo no oficial mostraron aumentos de población en el sureste de hasta el 200% en una década. Pero esos datos nunca se publicaron. Todos esos conflictos derivaron en golpes de estado, el intento de secesión de lo que entonces se conocía como la Región Oriental y una guerra civil.
Un gran problema. El resumen es que de 2006 a 2022 es demasiado tiempo. Sobre todo cuando la ONU recomienda actualizar el censo cada 10 años. Todo eso está dificultado muchísimo la implementación de políticas en Nigeria, que ni siquiera tiene un registro viable de inmigrantes y tiene que abordar muchos problemas de vivienda cuanto antes, dado el apresurado crecimiento que está experimentando.
En este artículo de Magnet, analizábamos cómo se espera que los países africanos lideren el crecimiento de la población mundial en las próximas décadas, siendo para 2100 un cuarto de todos los seres humanos en el mundo. Si esto va a suceder, lo mejor será empezar a saber cuanto antes cuántos son ahora mismo.
Imagen: Muhammad-taha Ibrahim (Unsplash)
https://www.xataka.com/magnet/nigeria-sera-tercer-pais-poblado-mundo-hoy-su-gobierno-no-sabe-cuantos-exactamente