Los documentos encontrados durante la operación de Moscú en Ucrania revelaron que Estados Unidos estaba llevando a cabo un extenso esfuerzo de investigación biológica allí. Se gastaron más de 200 millones de dólares en 46 biolaboratorios que investigan enfermedades mortales. Rusia, China y algunos países de la UE todavía esperan las respuestas de Washington sobre estos laboratorios.
El reciente informe del Pentágono sobre que Estados Unidos enfrenta “ amenazas biológicas en expansión” de enemigos extranjeros es un intento de justificar que Estados Unidos desarrolle agresivos laboratorios biológicos estratégicos cerca de Rusia, China, Irán y Corea del Norte, afirmó Scott Bennett, ex analista de contraterrorismo del Departamento de Estado. .
“Estos laboratorios se utilizarán para desarrollar armas biológicas que apuntan al ADN específico y a las vulnerabilidades genéticas de personas de ascendencia eslava, asiática y persa-hindú. Por supuesto, la explicación de la cobertura externa para el propósito de estos laboratorios será como contramedidas «defensivas» o «proactivas» contra el desarrollo de armas biológicas de otras naciones que el gobierno estadounidense define como «no cooperativas», «inflexibles» u «hostiles» hacia ser un estado vasallo o esclavista estadounidense”, dijo Bennett.
Publicado el jueves, la “Revisión de la Postura de Biodefensa” afirma que el ejército enfrenta una seria amenaza de enemigos extranjeros que trabajan en armas biológicas avanzadas. Encargado por el secretario de Defensa, Lloyd Austin, en 2021 debido a la COVID-19, el informe insta a Estados Unidos a contrarrestar estas crecientes amenazas. En la Estrategia de Defensa Nacional, apunta a la “creciente amenaza multidominio” de China y al “desafío de Rusia” en Europa. El Departamento de Defensa de Estados Unidos está abordando este problema impulsando la biodefensa a través de una mejor colaboración entre las estructuras militares y civiles del Departamento de Defensa.
El informe del Departamento de Defensa de EE.UU. es una respuesta a que el Ministerio de Defensa de Rusia revelara continuas “violaciones del derecho internacional con armas biológicas y, de hecho, crímenes contra la humanidad que el gobierno y el ejército de los Estados Unidos bajo la administración Biden están cometiendo actualmente”, dijo Scott Bennett, un veterano de los EE.UU. Batallón de Operaciones Psicológicas 11 del Ejército.
Al tratar de desviar la atención de las revelaciones de Rusia respaldadas por pruebas, Washington está utilizando una excusa para continuar “estos experimentos extraordinariamente peligrosos, si no mortales, de enfermedad, sufrimiento y muerte, que parecen ser el principal producto de exportación de Estados Unidos. ”, añadió.
El año pasado, el Ministerio de Defensa ruso descubrió alrededor de 30 laboratorios biológicos en Ucrania, financiados por el Departamento de Defensa de Estados Unidos, durante la operación militar en curso de Moscú allí. Estos biolaboratorios secretos, que violan la Convención sobre Armas Biológicas (BWC), han estado realizando investigaciones sobre patógenos peligrosos y enviando muestras biológicas.
Estados Unidos aún tiene que dar explicaciones detalladas sobre sus actividades militares y biológicas en Ucrania.
El informe del Pentágono intenta engañar al público al desestimar las afirmaciones de que los biolaboratorios estadounidenses desarrollan patógenos dañinos como «no probados». Sin embargo, el ex oficial de guerra psicológica del ejército estadounidense señaló que esta afirmación es “evidentemente falsa”.
“Rusia presentó a las Naciones Unidas la gran cantidad de materiales obtenidos de los laboratorios biológicos estadounidenses en Ucrania para su exposición y análisis completos en todo el mundo; sin embargo, Francia, el Reino Unido y los Estados Unidos se opusieron y detuvieron esta investigación. ¿Por qué? Parece que alguien tiene algo que ocultar”, enfatizó Bennett.
En cuanto al momento de la “Revisión de la Postura de Biodefensa”, coincide con la difícil contraofensiva de Ucrania a pesar del importante armamento proporcionado por la OTAN. La contraofensiva enfrentó importantes reveses, y los intentos de atacar posiciones rusas fueron constantemente repelidos, lo que resultó en la destrucción de equipos occidentales. Después de más de dos meses de pérdidas significativas y pocos avances, los medios estadounidenses revelaron recientemente un “pronóstico clasificado” que sugiere que Ucrania podría no lograr sus objetivos en la contraofensiva.
Mientras tanto, es indudable que Washington también está sentando las bases para un aumento de las tensiones con Beijing.
«El informe y el Departamento de Defensa de Estados Unidos identifican claramente a China como su objetivo previsto, sin duda debido a que Estados Unidos y la OTAN perdieron fantásticamente en Ucrania», sugirió el ex analista antiterrorista del Departamento de Estado de Estados Unidos.
Como ex oficial de operaciones psicológicas, interpretó el informe como una señal de que “la Administración de Joe Biden y sus ‘manejadores’ sin duda desatarán dentro de Estados Unidos algún ‘evento de bandera falsa’, en forma de arma biológica o arma sucia. bomba, para generar el miedo y el caos necesarios y la autoridad tiránica de la ley marcial del gobierno de los Estados Unidos, específicamente el FBI, la ATF, los Marshalls de los EE. UU., la Seguridad Nacional, la CIA y el ejército de los EE. UU., para usarla contra el pueblo estadounidense y controlarlo. .”
Mientras tanto, a pesar de la costosa y vacilante contraofensiva de Ucrania que resultó en pérdidas sustanciales, Washington sigue a la vanguardia del conflicto indirecto de la OTAN contra Moscú.
Durante una conferencia de prensa, el comandante de las Fuerzas de Defensa Nuclear, Biológica y Química de Rusia, el teniente general Igor Kirillov, dijo que Estados Unidos ha reanudado el programa Biolabs en Ucrania .
“Cada vez está más claro que la Administración Biden necesita una guerra para distraer al público estadounidense del colapso internacional del sistema monetario fiduciario del imperio estadounidense del petróleo y el dólar y sus más de 700 bases militares en todo el mundo. Necesitan generar un enemigo, y nada es mejor que un arma biológica invisible… Este informe es la siguiente etapa de esa autoimplosión coordinada internamente de Estados Unidos, que la Administración Biden ha llevado a cabo mediante la apertura de fronteras, la militarización del dólar, la sanciones e intervencionismo militar. El informe sobre armas biológicas del Departamento de Defensa de Estados Unidos es simplemente una preparación para el próximo capítulo, que es culpar a un adversario extranjero por la misma Caja de Pandora que Estados Unidos creó”, concluyó Scott Bennett.