El rey de Marruecos, Mohamed VI, en una ceremonia religiosa. EP
Ni las catástrofes naturales se libran de la realidad de la geopolítica. El terremoto de Marruecos del pasado viernes, que a cuentas de este lunes ha acabado con la vida de más de 2.000 personas, ha evidenciado las costuras abiertas de las relaciones del país con el resto de naciones y de las fuerzas que le rodean. Los conflictos políticos, así como las alianzas, han quedado boca arriba encima de la mesa pese a un desastre sin culpables. Mohamed VI solo ha aceptado la ayuda humanitaria activa de cuatro países a los que considera aliados -véase España, Reino Unido, Emiratos Árabes y Catar-, al tiempo que ha rechazado a otros con quienes tiene fricciones, como son Francia, Argelia o Estados Unidos. Todo con la ausencia del propio rey en la zona afectada por estar de vacaciones en París.
Solo acepta ayuda de cuatro países
El Gobierno de Marruecos solo ha dado luz verde a la ayuda de cuatro países que se la ha brindado para llevar a cabo los trabajos de salvamento y búsqueda derivados del grave terremoto. Estas naciones, aparentemente consideradas aliadas por el ejecutivo marroquí, son España, Reino Unido, Emiratos Árabes y Catar, que han ofrecido al país medios personales y materiales para hacer frente al desastre en las localidades afectadas, especialmente en el sur del territorio. Sin embargo, las consecuencias no parecen haber movilizado fuera de sus límites a Mohamed VI, que ha rechazado los ofrecimientos de otros países al tiempo que ha evitado solicitar auxilio a nadie más bajo el argumento de que no tienen necesidad de ello. Recepción selectiva de socorro.
Según fuentes cercanas a la Administración, el país está siguiendo una «aproximación responsable, rigurosa y eficaz» para gestionar las demandas de apoyo internacional, que relacionan directamente con las necesidades que detectan. Sostienen que los ciudadanos no necesitan tiendas de campaña por lo que «no serviría de nada gestionar almacenes de tiendas de campaña cuando no hay la necesidad». Sin embargo, cabe destacar que precisamente los países de los que ha aceptado una aportación son aquellos con los que tiene una mejor relación. Con Reino Unido le une unas relaciones comerciales millonarias y con Emiratos Árabes y Catar la historia. En los que respecta a España, las polémicas de los últimos meses por el acercamiento del Gobierno de Pedro Sánchez no parece haber afectado negativamente, a la luz de esta alianza.
Pide auxilio a España
Pocas horas después del terremoto, Marruecos solicitó de forma oficial ayuda humanitaria a nuestro país, tal y como ha anunciado el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación en funciones, José Manuel Albares, quien ha explicado públicamente que no ha habido víctimas españolas así como que este contacto se ha producido en la madrugada del domingo y que ha sido entonces cuando se ha puesto en marcha un dispositivo de la mano de la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el de Interior, Fernando Grande-Marlaska. Un operativo que cuenta principalmente con equipos de salvamento y rescate, «porque es lo que es urgente para encontrar el mayor número de personas con vida», y tiene en filas tanto medios humanos como materiales.
Así, procedente de Zaragoza, en el país ya se encuentra un equipo de Búsqueda y Rescate Urbano (USAR) de la Unidad Militar de Emergencias (UME) compuesto por 56 militares y cuatro perros para colaborar en la búsqueda y rescate de supervivientes del devastador terremoto. Según el Ministerio del Interior español, la Dirección General de Protección Civil y Emergencia está coordinando el despliegue de un total de 65 efectivos de la UME, a los que podrán sumarse equipos adicionales de comunidades autónomas. Además, está previsto que viaje un equipo de 30 personas de la Unidad Especial de Emergencia y Respuesta Inmediata de la Comunidad de Madrid (Ericam), integrado por bomberos y personal de Summa112, junto a guías caninos y cuatro perros de rescate. En paralelo, cinco bomberos del Ayuntamiento de Málaga.
Argelia le tiende la mano
Enfrente se encuentra Argelia. Su presidente ha ofrecido ayuda a Marruecos pero la geopolítica pesa más. Se trata del ofrecimiento más llamativo ya que ambas nacionales tienen profundos desencuentros políticos históricos que han llevado al cierre de las fronteras entre los dos desde el año 1994. Lejos de mejorar la situación empeoró hasta que en 2021 Argelia cerro su espacio aéreo a los aviones marroquíes. Sin embargo, el terremoto ha hecho que el país anunciara el sábado su apertura para facilitar la llegada de vuelos humanitarios hacia la zona afectada, un gesto que responde a la urgencia de la coyuntura provocada por las placas tectónicas.
«En el marco de la ayuda logística y material de emergencia que nuestro país está dispuesto a proporcionar al hermano pueblo marroquí para hacer frente a las consecuencias del potente terremoto, Argelia ofrece un despliegue de emergencia, en el caso de que el reino de Marruecos acepte esta oferta de asistencia, de un equipo de intervención de Protección Civil compuesto por ochenta socorristas especializados», ha afirmado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores argelino, que ha ofrecido un pack de intervención compuesto por un equipo canino especializado en la búsqueda e identificación de personas bajo los escombros, un equipo de rescate y búsqueda, médicos, así como ayuda humanitaria de primeros auxilios, que incluye tiendas de campaña, camas y mantas. Pero no han obtenido respuesta de Mohamed VI.
Portazo a Francia
El rey marroquí tampoco quiere nada de Francia, excepto sus ciudades para pasar las vacaciones. Al igual que Argelia, el gobierno de Emmanuel Macron comunicaron su ofrecimiento al tiempo que han señalado que desde el país afectado no han solicitado ayuda internacional para afrontar los efectos de la catástrofe. «Marruecos no ha presentado ninguna solicitud de ayuda internacional por el momento», ha manifestado este domingo la portavoz del Ministerio de Exteriores francesa, Anne-Claire Legendre. Sin embargo, sí han confirmado que «ha habido conversaciones» entre París y Rabat, y ha afirmado en que ambos países se encuentran en «contacto constante». «Este es el trabajo que nuestro embajador está haciendo sobre el terreno, poder evaluar cómo podemos brindarles asistencia cuando lo necesiten», ha sostenido Legendre.
El propio Macron ha manifestado abiertamente que París está dispuesta a «intervenir» para ayudar en el momento en que la administración de Mohamed VI «lo consideren útil». Pero no ha llegado. De hecho, Marruecos ha rechazado en las últimas horas la ayuda humanitaria de este país al tiempo que la prensa marroquí ha ensalzado la cooperación con otros países, especialmente de España. Un portazo que resuena mientras se conoce que el propio monarca se encontraba precisamente de vacaciones en la capital francesa cuando todo sucedió. Además, cabe destacar que desde lo ocurrido solo ha salido públicamente en una ocasión y no se ha acercado a la zona perjudicada. También otros enemigos como Israel o Estados Unidos han hecho su ofrecimiento, pero asimismo han sido rechazados.
https://www.elplural.com/politica/internacional/terremoto-marruecos-evidencia-costuras-relaciones-internacionales_316734102
Si este artículo de El Plural dice que Estados Unidos no es aliado de Marruecos no merece la pena continuar leyendo.
Hola Style:
Tuve exactamente el mismo pensamiento que el que comentas. Pero la verdad de otras fuentes consultadas es que ni los EEUU ni Israel, tienen equipos de salvamento en Marruecos. Por otra parte esto se ha silenciado en los medios oficiales, que han señalado sólo, que se ha autorizado a muy pocos paises para la ayuda, sin especificar.
Puede que la guerra de dominio en África, haya cambiado algunos pactos que a Marruecos no le han gustado.
En cualquier caso, con decir que esta noticia es falsa, sin más, creo, no llegaríamos a desentrañar lo que hay detrás.
Un saludo
Es verdad, hoy en día es prácticamente imposible distinguir la verdad de la mentira o la manipulación, y a veces hay verdades y mentiras mezcladas. Además tendemos a creer que lo que nos cuentan es verídico. Intentaremos indagar, gracias por la contestación.