Niños de tres y cuatro años fueron enviados a una clínica transgénero del Servicio Nacional de Salud británico

Niños de tan solo tres años han sido remitidos a la clínica transgénero ‘Servicio de Desarrollo de Identidad de Género’ de la medicina socializada de Gran Bretaña, y cientos de niños pequeños fueron remitidos en la última década.

382 niños de seis años o menos han sido remitidos al Servicio de Desarrollo de Identidad de Género (GIDS) en Tavistock and Portman Trust, conocido comúnmente como la clínica transgénero del Servicio Nacional de Salud, según revelan nuevas cifras del Trust en los últimos diez años. Las cifras, publicadas por el Daily Mail , revelan cómo incluso los niños más pequeños se han visto obligados a interactuar con la controvertida clínica, y que el número de derivaciones al GIDS se ha disparado en los últimos años.

La clínica, que no tiene un límite de edad oficial para los menores que atiende, ha recibido 12 niños de tres años remitidos entre 2010 y 2020, así como 61 niños de cuatro años, 140 niños de cinco años y 169 niños de seis años. El número de jóvenes enviados al GIDS año tras año muestra la rapidez con la que se está extendiendo el concepto, con 136 derivaciones en 2010-2011 y 3.585 una década después.

Se informó anteriormente que la clínica “trató” a unos 19.000 niños de todas las edades en 25 años.

El informe del Daily Mail también citó el propio intento de la Clínica Tavistock de defender las cifras, insistiendo en que si bien aceptó derivaciones para niños de tres años, en realidad no realizó lo que eufemísticamente llaman “tratamiento” a los bebés. En cambio, se dijo, “el personal normalmente mantiene una ‘conversación única’ con los padres o cuidadores para brindarles apoyo y asesoramiento”.

Se suponía que la clínica de género de Tavistock Trust sería cerrada después de que la noticia de lo que realmente les sucedió a los niños allí se hiciera pública gracias a los denunciantes. Se consideró que el servicio era “inadecuado” y que “algunos pacientes fueron remitidos a una vía de transición de género demasiado rápido” y a algunos niños se les administró bloqueadores de pubertad después de una sola consulta.

La Asociación de Psicólogos Clínicos del Reino Unido (ACP-UK) dijo que el cierre de la clínica fue “precipitado por una serie de fallas sistémicas”, incluido un “enfoque predominantemente afirmativo, en lugar de exploratorio”. En realidad, el cierre de la clínica se ha retrasado al menos un año ya que el NHS quiere establecer más clínicas trans para reemplazarla.

Se informa que más de mil familias están iniciando acciones legales contra la clínica por diagnosticar erróneamente a sus hijos y, en muchos casos, supuestamente causó daños enormes, incluidos adolescentes a quienes les cortaron partes del cuerpo.

Niños de tres y cuatro años fueron enviados a una clínica transgénero del Servicio Nacional de Salud británico

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