Meditando sobre lo que nos dice este Mercurio Retrógrado en su intenso paso sobre Kirón, el Nodo y Eris, algo que ocurre 3 veces en este ciclo retrógrado del pequeño planeta, pienso en la apatía de muchos jóvenes y no tan jóvenes hoy en día, desencadenada también, indudablemente, por todos esos años de Plutón en Capricornio, que erosionaron toda la fe y confianza en aquellos que se desplazan por los corredores del poder.
En la era digital de hoy, la omnipresencia de los medios en nuestra vida diaria es innegable. Las noticias no solo provienen de periódicos y televisión, sino que también inundan las redes sociales, influyendo en las percepciones y moldeando mentes. Sin embargo, este bombardeo constante tiende a inclinarse pesadamente hacia lo negativo, con titulares frecuentemente dominados por conflictos, desastres y desesperación. Esta negatividad persistente puede tener un impacto psicológico profundo, especialmente en los jóvenes, cultivando un sentido de apatía que amenaza su compromiso con el mundo que les rodea.
Históricamente, los medios de comunicación han operado bajo el adagio «si sangra, lidera», lo que implica que si es macabro y negativo, todos lo miramos más. Las historias sensacionalistas que involucran crímenes, accidentes o escándalos tienden a atraer más espectadores o lectores. Esto nos afecta a todos. Esta estrategia, impulsada por la economía de la industria mediática, asegura ojos en pantallas y periódicos en manos. Pero las repercusiones de este enfoque son particularmente severas para los jóvenes. La exposición constante a dicho contenido puede distorsionar la percepción de la realidad de los jóvenes, haciendo que el mundo parezca más hostil y deprimente de lo que realmente es. Se ha vuelto obvio, como sugieren muchos estudios, que la exposición prolongada a noticias negativas puede llevar a un aumento de sentimientos de tristeza y ansiedad. Puede exacerbar los temores personales sobre el futuro, y cuando las noticias son implacablemente sombrías, puede llevar a un fenómeno conocido como ‘fatiga de compasión’—donde un individuo se vuelve indiferente a los informes mediáticos de sufrimiento porque se siente abrumado e impotente para cambiar la situación.
Este sentimiento de impotencia es a menudo un camino directo hacia la apatía y la desidia . Cuando los jóvenes sienten que sus acciones no pueden influir en los problemas sociales, pueden desvincularse, creyendo que la participación es inútil. Esta desvinculación puede manifestarse de varias maneras: baja participación en las elecciones, disminución del involucramiento comunitario y un cinismo hacia las instituciones políticas y sociales y las constantes teorías negativas de conspiración que nos vuelven víctimas. Tal apatía no solo disminuye la ciudadanía activa, sino que también obstaculiza la capacidad de las sociedades para efectuar cambios a través de la acción colectiva.
La cuadratura entre Kirón y Pholus, que ha estado activa durante los últimos 4 años, además de las restricciones de Covid, también nos trajo la conciencia y el peligro de este negocio mediático donde la falta de moral es ahora demasiado evidente para todos.
A medida que Kirón se acerca cada vez más a la conjunción con Eris, y nos hacemos más conscientes de los efectos de tratar a las personas como seres inferiores por aquellos con más poder, debemos meditar sobre la responsabilidad de todos y la necesidad de hablar (Mercurio), de hacer saber a los que están en el poder que no son tan astutos, que todos podemos ver lo que están haciendo y, sobre todo, que la mayoría tenemos la capacidad de actuar y ganar si simplemente nos lo proponemos y pensamos en términos de NOSOTROS, como exige Acuario, en lugar de Tú y Yo ó Ellos y Nosotros.
Nadie como Kirón para mostrarnos el camino hacia la sanación y, de paso, ayudarnos a armar un Ego saludable, y verdaderamente heróico, para que dejemos atrás a la Víctima y al Desencantado y tomemos acción positiva.
La teoría de gente como Ilan Musk y Jeff Bezos de que DEBEMOS ser interplanetarios si queremos sobrevivir no ayuda en absoluto, simplemente añade al sentimiento de fatalidad y desesperanza. Debemos considerar que quizás aquellos que tienen todo lo que alguna vez quisieron sientan que no hay nada más que desear. Para la mayoría de nosotros, desear una Tierra más saludable y quizás ayudarla a recuperarse, todavía puede ser algo para Desear. Recordemos que esta Tierra ha estado aquí por millones de años y NOSOTROS los humanos solo menos de medio millón de años.
Todavía hay mucho que podemos hacer… Nuestra extraordinaria creatividad humana siempre está ahí…
¡Usémosla!
Meditando sobre Mercurio Retrógrado de la mano de Kirón, el Nodo y Eris – Abril 2024