Hallan un inquietante rostro humanoide en Marte. El rover Curiosity envió unas imágenes de SOL 528 con lo que aparentemente parece una estatua partida
Cara o pareidolia
Son legión quienes exploran las fotografías que transmiten los rovers de NASA desde la superficie de Marte en busca de anomalías. Muchos lo hacen fascinados por explorar otros mundos desde la comodidad que otorga nuestro ordenador; unos pocos con curiosidad científica y muchos otros con la vocación de hallar evidencias de que el planeta rojo estuvo habitado.
Recordemos la polémica sobre el rostro de Cydonia que envió la sonda Viking 2, a mediados de los años setenta del siglo pasado. En la descripción técnica de la fotografía tomada desde casi dos mil kilómetros de altitud por la sonda espacial rezaba: “La fotografía muestra terrenos con forma de meseta, una gran formación rocosa en el centro, la cual con las sombras asemeja una cabeza humana y da la ilusión de ojos, nariz y boca.” Lo parecía tanto que cuando la NASA dijo que era una pareidolia, que era una lectura engañosa de nuestro cerebro, la cara de Cydonia pasó a convertirse en paradigma de la conspiración marciana. La agencia espacial estadounidense hizo sobrevolar a la Mars Global Surveyor, en 2001, y a la sonda Mars Odyssey en 2002, para la obtención de nuevas fotografías que despejaran la incógnita. A muchos no les convenció y creyeron que la NASA ocultaba «algo».
Desde entonces, regularmente saltan a los medios y especialmente en Internet imágenes inquietantes, a veces hasta manipuladas, que tratan de convencernos de que ahí arriba hubo alguien parecido a nosotros.
Ahora ha empezado a circular por las redes sociales una nueva cara que formaría parte de una suerte de estatua. Se alega erroneamente que es de junio de 2024 y, como en el caso del rostro de Cydonia, sólo es visible la mitad de la cara, aunque se han tomado la molestia de crear una vista frontal artificialmente haciendo un efecto espejo. El resultado es sobrecogedor porque, en efecto, parece un rostro humano que algunos no han dudado en relacionar con la civilización egipcia.
Pero la fotografía no es actual. En realidad, fue obtenida a finales de enero de 2014 por la Mast Camera, un dispositivo situado en lo alto de un mástil, del rover Curiosity de la NASA, en una zona llamada Sol 528 del planeta rojo.
En la imagen panorámica original pasa completamente desapercibida, pero si hacemos zoom en el sector derecho de la imagen observaremos varias rocas y una es esta piedra que guarda un extraordinario parecido con un rostro humano. No es un montaje.
No hubiera merecido mayor atención que la cuchara, la puerta u otras estructuras supuestamente artificiales de no ser porque el doctor en ciencias geológicas y mineralógicas Alexander Mikhailovich Portnov, del departamento mineralogía, geoquímica, petrografía RGGRU ha declarado que, si en la Tierra hubiera encontrado rocas tan milagrosamente esculpidas, no habría tenido ninguna duda de que se trataba de restos de pueblos antiguos (sic).
Este geoquímico ruso es el mismo que dijo haber descubierto en 1992 unas rocas que eran «indistinguibles de los cráneos humanos comunes» en unas fotografías transmitidas por el rover Spirit desde el cráter Gusev; «tenían cuencas para los ojos y un agujero en lugar de la nariz». El científico cree que hace miles de años había bosques, ríos y mares, donde vivirían animales y marcianos antropoides marcianos.
La nueva vista vertical creada a partir de la fotografía del rover de la NASA pone evidencia que lo se interpretó como una oreja en realidad no forma parte del bloque de piedra. Detrás de él sólo hay un afloramiento rocoso. En la vista vertical de la «cara» (arriba), la impresión no es tan obvia como en la vista horizontal. Por lo tanto, el ángulo de visión también es un aspecto fundamental en la psicología de la percepción. Desafortunadamente, al ocultar el fondo como una superficie negra, la impresión de una oreja ajustada realza la sensación de que estamos frente a un rostro porque se elimina información importante que podría haber evitado la mala interpretación visual. Lo que los psicólogos llaman una ilusión causal.
Hay que añadir, por último que la anomalía está aislada. El entorno no sugiere que haya construcciones u otros fragmentos de la presunta estatua que pudieran dar contexto a la imagen del rover. Al no haber más estructuras cabe pensar que nos hallamos frente a un efecto pareidolia que se ha visto potenciado por el tratamiento de la imagen al extraerla de su contexto con la intención última de dar validez a la teoría de que en Marte hubo vida (y no sólo bacteriana que parece que estamos en camino de anunciarlo) sino de una civilización tecnológica que desapareció de la superficie del planeta debido a un cataclismo.
https://www.espaciomisterio.com/conspiraciones/nasa-fotografia-misteriosa-cara-en-marte_58707