El primer ministro británico, David Cameron, ha aprobado unos planes de contingencia destinados a incrementar la presencia militar en las Malvinas, a raíz de la tensión entre el Reino Unido y Argentina por la soberanía de las islas, informa hoy el diario «The Times». Según el periódico, Cameron dedicó una jornada a evaluar con los militares británicos la retórica cada vez más agresiva procedente del Gobierno argentino encabezado por Cristina Fernández de Kirchner.
El jefe del Gobierno informó el miércoles en el Parlamento de que había convocado al Consejo Nacional de Seguridad para tratar la situación y acusó a Argentina de «colonialismo» por reclamar la soberanía de las islas, como lo viene haciendo desde 1833. El Reino Unido tiene planes para desplegar rápidamente efectivos militares en las islas a través de la isla de Ascensión, en el océano Atlántico, añade «The Times». «Hay planes de contingencia. Estamos seguros de tenerlos y son los correctos», dijo una fuente de defensa al diario.
Según «The Times» -que dedica toda su portada al conflicto y titula «Nueva alerta en Malvinas»-, el Gobierno de Cameron considera que las islas están hoy mejor protegidas que en 1982, cuando la Junta militar argentina decidió ocuparlas el 2 de abril de ese año, acción que provocó una guerra entre los dos países. Las islas cuentan con cuatro aviones Thyphoon en Mount Pleasant, base aérea que tiene un radar, y siempre hay una fragata o un destructor que patrulla la zona, informa el periódico, que añade que el Ministerio británico de Defensa no ha querido revelar dónde están sus submarinos nucleares.
En una sorpresiva declaración parlamentaria, Cameron reveló que había convocado al Consejo Nacional de Seguridad y que Argentina no debía subestimar su determinación a defender a los isleños. «Yo diría que lo que los argentinos han estado diciendo recientemente es mucho más colonialismo porque esta gente (por los malvinenses) quiere seguir siendo británica y los argentinos quieren que ellos hagan otra cosa», afirmó Cameron ayer en el Parlamento.
En respuesta a esta afirmación, el Gobierno argentino consideró «absolutamente ofensivas» las afirmaciones del primer ministro. «Son absolutamente ofensivas, sobre todo tratándose del Reino Unido. La historia muestra claramente cuál fue su actitud frente al mundo», dijo el ministro argentino del Interior, Florencio Randazzo.
Hace once días, el primer ministro ya indicó que descartaba una negociación con Argentina sobre la soberanía de las islas y dijo que su país debe mantener la «vigilancia», en clara referencia a la decisión de varios países latinoamericanos de bloquear el acceso a sus puertos de buques con bandera malvinense. En una cumbre celebrada el pasado diciembre en Montevideo, los países del Mercosur -Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay- acordaron bloquear el acceso a sus puertos de buques con bandera de las Malvinas.
Este año se cumple el trigésimo aniversario de la guerra que enfrentó a los dos países por la posesión de las Malvinas, que terminó el 14 de junio de 1982 con la rendición de Argentina. En el conflicto bélico murieron 255 militares británicos y más de 650 argentinos.
El mes próximo, el príncipe Guillermo, segundo en la línea de sucesión a la corona británica, viajará a las Malvinas para tomar parte en unos entrenamientos como piloto de helicóptero de rescate. Sobre ese viaje, el Gobierno británico ha puntualizado que la presencia del príncipe en las islas poco antes de que se cumplan los treinta años del conflicto armado es pura coincidencia.