Lo que fue Polanco ya lo es Lara. Más lo será con su amigo Rajoy en la presidencia. José Manuel del Gran Poder presionó para que el PP convirtiese la ley Sinde en la de Rajoy y además va enviando avisos de por donde deben ir las cosas en el futuro que para eso es uno de los grandes de España y todos se lo reconocen, oye, que después de Brufau, Botín, Alierta y los eléctricos (nucleares sí, gracias) no hay nadie más grande que él en esta España que parece la de ayer. Así va.
El caso es que hoy el dueño de La Razón y presidente de Planeta, el grupo Antena 3 y con intereses directos en el Cine (Mooooooooviercord), ha criticado la Ley Sinde por no ser lo suficientemente dura porque debería penalizar también a los usuarios.
Durante su intervención en el IESE de Barcelona, Lara ha anticipado el futuro que le gusta: “la legislación francesa, que es bastante más dura” y que va contra los portales y los usuarios. Lara ha querido explicarse:
En este país no tenemos la cultura de la propiedad intelectual y no hay conciencia de que la piratería es un delito igual que entrar a robar a casa de alguien.
Lara ha cargado especialmente, con muy mal estilo, contra el ex presidente de la Academia de Cine, Álex de la Iglesia, al decir que “es inaudito que un director de cine piratee a sus colegas”. En cambio ha reconocido que el canon digital es una “mala ley porque no diferencia ni discrimina” el uso de los dispositivos. En este sentido, ha criticado que “la mayor piratería se haga en las fotocopiadoras de las facultades de la universidad pública”.
Sobre el plagio no ha explicado nada. Sí lo ha hecho sobre el asunto que le produce canguelo: el papel. Aquí viene a anticipar ¿la muerte de La Razón? en un “plazo futuro” en el que no habrá más que dos periódicos y el resto “estaremos” en Internet.
Aunque ya anticipó que aquí tampoco sobrevivirán los que se alejen de la moderación, que es quizá lo que le ha pasado a su periódico fundamentalista en la radical defensa del lobby de la propiedad intelectual y el extremismo editorial vaticanista, tan alejado del centro sociológico español que no comulga con la moralina prohibicionista del viejo conservadurismo español.
Lara también ha confirmado en Barcelona que abandona, por ahora, en su intento de fusionar Antena 3 con La Sexta, cadena que como Berlusconi con la Cuatro y CNN+ quiere sumar a su escudería editorial. Con Mariano será. Apuesta particular. Pobre España.