• Reino Unido ha equipado a sus agentes con detectores de calor para evitar que salga de la embajada oculto en una valija diplomática.
• Mantiene un amplio dispositivo de seguridad con hasta 40 agentes de Scotland Yard custodiando el perímetro de la embajada de Ecuador.

El conflicto diplomático entre Ecuador y Reino Unido por el caso del fundador de Wikileaks, Julian Assange, puede resultar realmente caro para los intereses británicos. Literalmente. El amplio dispositivo de seguridad con hasta 40 agentes de Scotland Yard custodiando el perímetro de la embajada de Ecuador en Londres, con el fin de asegurar que Assange no la abandone sin ser detenido, supone un coste de algo más de 64.000 euros diarios, según informa la agencia Ansa.

La decisión de Ecuador de conceder asilo diplomático a Assange ha disparado las alarmas en la isla. Antes de conocerse, Reino Unido ya había dejado claro que negaría el salvoconducto al fundador de Wikileaks para que pueda abandonar el país. Para evitarlo, realizó un sorprendente despliegue que se mantiene hasta el momento para impedir a toda costa que consiga salir de la sede diplomática.

Las opciones para Assange se agotan. Una de las que se baraja es que pueda escapar en una bolsa diplomática, algo prohibido por las convenciones internacionales. A pesar de ello, Reino Unido no se fía y ha equipado a sus agentes con detectores de calor para comprobar todos los objetos que salen de la embajada ecuatoriana.

Las autoridades británicas ya ha advertido de que si pisa la calle, será detenido de inmediato, y extraditado con la misma celeridad a Suecia, donde debe responder a acusaciones de abusos sexuales y violación. Los expertos creen que el siguiente paso sería su extradición a Estados Unidos, donde podría ser condenadoa a cadena perpetua e, incluso, a pena de muerte por un tribunal especial.