- El sercretario general, Sebastián Mora insiste en «el empeoramiento rápido y profundo de las personas y sus situaciones»
- Cáritas denuncia que los inmigrantes tienen miedo de ir al médico por la reforma sanitaria.
La crisis ha provocado el aumento en tan sólo 5 años de las personasatendidas por los servicios de acogida y asistencia de Cáritas. Desde 2007 ha pasado de 370.251 personas a más de un millón en 2011 (1.015.276) en 2011, según ha anunciado este jueves Cáritas, lo que supone un aumento de más del 174%.
En la presentación de su VII Informe del Observatorio de la Realidad Social sobre «Los efectos permanentes de la crisis», el sercretario general de esta organización, Sebastián Mora, ha expresado su «honda preocupación» y «radical incertidumbre por los efectos de la crisis». Insiste en «el empeoramiento rápido y profundo de las personas y sus situaciones» y que cada vez «son más crónicas e intensas» y que están «erosionando los mecanismos básicos de la ayuda social».
Sebastián incide que si es verdad que en época de crisis todos debemos hacer sacrificios pero «no tienen que empezar por los más pobres y vulnerables». Pero dentro de la «desesperación» que produce el aumento de pobreza, injusticia y desigualdad que se vive en la actualidad, el secretario general de Cáritas destaca que la solidaridad ha aumentado dentro de la sociedad y es ésta la que hace que la actividad de la organización se siga produciendo con calidad y eficacia.
El informe incide en que casi la mitad de las Cáritas Diocesanas empiezan a mostrar una «ralentización del crecimiento en el número de personasatendidas. Sebastián especifica que esto se debe a dos motivos principalmente: a la «incapacidad de asumir más demandas» por parte de la organización y por optar «por la calidad en la atención frente a la cantidad», dando prioridad a las situaciones más graves.
Las necesidades de alimentación y vivienda son las más demandadas
El 56% de las Cáritas repartidas por el terriotorio español indican que las necesidades de alimentación han sido las más demandadas, seguidas de vivienda, empleo y ropa y calzado. Otras serían necesidades como gastos sanitarios o asuntos legales.
El número de respuestas de ayuda económica se multiplicaron por 6 entre 2007 y 2010, al pasar de 108.000 a más de 700.00. En el 2011 empiezan a decrecer ligeramente, siendo algo menos: para alimentación 400.000, más de 50.000 para vivienda y 60.000 para ropa y calzado.
Pero ya no es sólo ayuda económica para necesidades básicas, sino que aumentan las demandas de espacios en los que poder desarrollar relaciones con otras personas. Las acciones que atienden este tipo de necesidades tienen un gran valor porque son muy significativas y transformadoras en la trayectoria vital de las personas, de las relaciones y de la sociedad. La escucha (y los espacios dónde poder hablar) se convierten en la necesidad «no económica» más demandada y extendida.
En este sentido, el coordinador del equipo de estudios que ha llevado a cabo el informe, Francisco Lorenzo, ha reflejado que en los últimos años se ha consolidado la desigualdad territorial en los requisitos y las ayudas solicitadas por las personas más necesitadas dependiendo de las comunidades autónomas.
Aumento en la demanda de ayuda para el servicio sanitario
El secretario general de Cáritas, Sebastián Mora, ha alertado de que los inmigrantes en situación irregular “empiezan a tener miedo de ir a los hospitales y a los centros de atención primaria”, como consecuencia de la entrada en vigor del Real Decreto-Ley 16/2012, que entre otros aspectos puede motivar la pérdida de la tarjeta sanitaria para este colectivo.
En la presentación del séptimo informe del Observatorio de la Realidad Social, Mora afirmó que “hemos detectado una mayor presencia de personas inmigrantes sin papeles que demandan ayuda médica”, y justificó el temor entre esta población porque desde el 1 de septiembre “entienden que están al margen de los derechos del resto de la ciudadanía”.
A la hora de asistir a un centro de salud “tienen miedo de la policía, de que les vayan a denunciar, de que les llegue una factura a casa, de que no se les atienda más”, recalcó.
Además, Mora indicó que desde primeros de septiembre se ha detectado “un aumento en las peticiones de ayuda para medicamentos y otros gastos sanitarios”, no solo entre los inmigrantes, sino entre muchas personas que ahora tienen que pagar más aunque sus rentas sean muy reducidas. Si en 2011 Cáritas destinó un millón de euros a ayudas sanitarias, este año prevemos que será más”, señaló Mora.
Asimismo, denunció que existe una “gran incertidumbre sobre qué hacer y cómo hacerlo”, pues “ni siquiera las comunidades autónomas lo tienen claro”, apuntó.
“Unas quieren que se subcontrate con organizaciones sociales, otras han dicho que no cambiarán nada y en algunas los médicos se están organizando de forma extraoficial para atender a los inmigrantes irregulares con solo un certificado de empadronamiento”, detalló.
De este modo, va a suceder algo que ya advirtió Cáritas, apuntó su secretario general: “La aparición de una red paralela que significará una grave injusticia social”.
Las parejas jóvenes con hijos y las mujeres son los perfiles más habituales
Cabe destacar el elevado número de desempleados que han pasado de ser «recientes» (al inicio de la crisis) a ser de larga duración. Muchas parejas jóvenes se han visto muy afectadas, así como mujeres solas con cargas familiares. Los grupos que más han aumentado con la crisis son:
– De nacionalidad española y extracomunitaria en irregularedad sobrevenida.
– En riesgo de perder su vivienda.
– Las parejas con hijos y, en menor medida, personas solas y familias monoparentales.
– Los jóvenes adultos con una edad entre 30 y 44 años.
– Y las personas sin ingresos o con Rentas Mínimas.
Sebastián Mora ha hecho un llamamiento a la sociedad a seguir colaborando con las personas en situaciones más desfavorecidas y ha finalizando apuntando que «todos somos responsabilidad de todos».