El ministro del Interior francés, Manuel Valls, ha anunciado este jueves la supresión de los criterios de naturalización «más discriminatorios» con el fin de incrementar el número de personas que pueden obtener la nacionalidad francesa.

Según ha explicado desde Toulouse, ha enviado a los prefectos una circular que prevé el abandono inmediato del cuestionario de opción múltiple de conocimiento de la cultura francesa, muy criticado, así como el que se tengan en cuenta contratos precarios y no solo indefinidos en la evaluación de la inserción profesional de los solicitantes.

Valls ha criticado la política del anterior Gobierno de Nicolas Sarkozy en materia de naturalización y ha dicho que quiere proceder en dos fases. «Lo urgente, primero, es recuperar la curva del número de nacionalizaciones dando marcha atrás a los criterios que son los más discriminatorios que provocan casi el 70 por ciento de los rechazos», ha indicado durante una ceremonia de nacionalización.

En una segunda fase, que comenzaría a principios de 2013, una circular marco «pormenorizará todos los criterios y sus condiciones de apreciación» teniendo en cuenta el resultado de una concertación y el informe de la misión parlamentaria dirigida por el diputado socialista Patrick Mennucci.

Por otra parte, el ministro del Interior ha insistido en el hecho de que el anterior Ejecutivo «ha puesto trabas» al acceso a la nacionalidad francesa en los dos últimos años adoptando «consignas de endurecimiento». El número de nacionalizaciones cayó un 30 por ciento entre 2010 y 2011 y un 45 por ciento entre 2011 y 2012, ha precisado.

«La nacionalidad francesa no puede ser ni liquidada –no puede haber franceses de saldo–, ni reservada a unos pocos, una elite»,ha añadido el ministro, el mismo de origen español y naturalizado francés.

«No quiero abrir nuevos debates (…) transformando el conjunto del dispositivo de acceso a la nacionalidad. Se trata, simplemente, serenamente, de adoptar tods las medidas con el fin de que hacer este dispositivo más transparente, más justo, más eficaz», ha defendido.

Esta reforma del proceso de naturalización debe permitir principalmente, según el ministro, reformar el dispositivo de información, mejorar la recepción de los demandantes en la prefectura o alentar la preparación de los candidatos.

MEDIDAS INMEDIATAS

La circular enviada este jueves a los prefectos prevé en particular que se tengan en cuenta los contratos de duración determinada o el trabajo interino y no solo los contratos indefinidos, al tener en cuenta la inserción profesional de los candidatos. «Rechazo la idea de que solo los que tengan un contrato indefinido puedan convertirse en franceses», ha subrayado Valls.

El documento ordena también que se abandone el cuestionario de respuesta múltiple que se realizaba para probar el nivel de conocimiento sobre la cultura y la historia de Francia. «Desde ahora, el método del cuestionario de opción múltiple (…) se abandona por decisión del primer ministro», ha precisado Manuel Valls.

Para Eric Ciotti, diputado de UMP (centro-derecha) cercano al exprimer ministro François Fillon, «no puede ser francés quien quiera». «La nacionalidad francesa debe merecerse y debe suponer un cierto esfuerzo en lo que respecta a la asimilación de la historia, de la cultura y de la lengua francesa», ha señalado.

«Querer venderla barata, como desean los socialistas así como sus socios comunistas y ecologistas, es totalmente irresponsable y peligroso», ha prevenido

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