NUEVA YORK (EFE) — Las fuerzas de Moammar Gadhafi están utilizando bombas de racimo de fabricación española para atacar a los rebeldes opositores y contra los residentes de la ciudad de Misrata, denunció la organización Human Rights Watch (HRW).
El organismo defensor de derechos humanos alertó este viernes en un comunicado sobre el grave peligro que suponen esas bombas para la población civil, después de investigar diversos fragmentos encontrados en esa ciudad libia.
La investigación concluyó que las bombas usadas son MAT-120, fabricadas por la empresa española Instalaza en 2007, uno antes de que España suscribiera el tratado internacional contra las bombas de racimo.
HRW informó que las bombas se encontraron en un barrio residencial de Misrata después de los ataques de las fuerzas de Gadhafi del jueves.
Según la organización, hay dos conductores de ambulancias que podrían confirmar que en Misrata ha habido otros ataques con bombas de racimo.
«Es horrible que Libia use este tipo de armas, especialmente en una zona residencial. Suponen un riesgo enorme para los civiles tanto durante los ataques, por su naturaleza indiscriminada, como después, porque quedan esparcidos fragmentos sin explotar que siguen siendo peligrosos», indicó el director de la división de HRW dedicada al armamento, Steve Goose.
La mayoría de los países han suscrito la Convención contra las Bombas de Racimo, que se convirtió en ley internacional vinculante en agosto de 2010.
Según registros de HRW, a finales de 2008 España destruyó sus reservas de 1,852 MAT-120, que contenían 38,892 municiones. Lo hizo después de firmar la Convención contra las Bombas de Racimo el 3 de diciembre de 2008, misma que fue ratificada el 17 de junio de 2009.
Las bombas de racimo se abren «en el aire y dejan escapar 21 municiones sobre una amplia zona», según HRW, que detalla que éstas «se desintegran en fragmentos a alta velocidad para atacar personas y desprenden balas de metal fundido capaces de penetrar en vehículos blindados».
Misrata fue este viernes escenario de nuevos ataques por parte de las fuerzas leales a Gadhafi, que dejaron al menos 22 personas muertas y unos 50 heridos en un bombardeo que también afectó a la ciudad de Ghnaimiya, según informó el canal de televisión Al-Jazeera.
Desde la entrada en vigor de la Convención contra las Bombas de Racimo, el uso de éstas en el mundo sólo se había registrado una vez, según HRW. El 6 de abril de este año se llegó a la conclusión de que en Tailandia también se usó ese tipo de municiones sobre territorio de Camboya durante un conflicto sobre la frontera de febrero de 2011.
Me parece terrible esta noticia.Pero querian venderlas,antes exportabamos naranjas ahora bombas.No estoy de acuerdo con lo que estan haciendo ni con la guerra.Donde esta la humanidad,esperemos que esto no nos rebote a los españoles.