EE.UU. venderá a Taiwán equipos antimisiles punteros a pesar de la fuerte oposición china al suministro de armas a la isla, que considera parte de su territorio.
En una reunión que mantuvieron esta semana el senador estadounidense James Inhofe y el presidente taiwanés, Ma Ying-jeou, Inhofe informó de que en 2015 EE.UU. venderá a la isla asiática equipos antimisiles punteros Patriot Advanced Capability-3 (PAC-3), aclara una nota de prensa de la Oficina Presidencial de Taiwán.
Además de estos equipos antimisiles, Washington planea vender a Taiwán 30 helicópteros de ataque Apache este año y 60 helicópteros de transporte Black Hawk en 2014, señaló el senador de EE.UU.
De acuerdo a Inhofe, las ventas de armas a Taiwán son parte de los compromisos recogidos en la Ley de Relaciones de Taiwán, aprobada por el Congreso de Estados Unidos en 1979.
La medida, sin embargo, no recibe la aprobación de Pekín, que considera el territorio parte del país. El portavoz del Ministerio de Defensa Nacional chino, Yang Yujun, ya condenó hace unas semanas la Ley de Autorización de Defensa Nacional 2013 aprobada por el Congreso de EE.UU., que además de la venta de armas a Taiwán contiene secciones controvertidas vinculadas con las disputadas islas Diaoyu (Senkaku, en la toponimia japonesa).
“El contenido constituye una burda injerencia en los asuntos internos de China y es perjudicial para nuestra confianza estratégica mutua. Nos oponemos enérgicamente a ella”, dijo el vocero.
Asimismo, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Hua Chunying, ha mostrado la firme oposición del Gobierno a la venta de armas de cualquier país a Taiwán.
“Instamos a algunas personas del Congreso de EE.UU. a abandonar la mentalidad de la Guerra Fría y tomar en consideración los intereses de largo alcance de la paz y la estabilidad de la región”, señaló.
EE.UU. es el principal proveedor de equipo bélico avanzado a Taiwán. De hecho, el presidente taiwanés recordó en su encuentro que durante sus primeros tres años en el poder Washington había suministrado a Taiwán equipo militar por valor de 18.000 millones de dólares.