El menor ingresó con fuertes dolores y fiebre en un hospital local el 13 de octubre del 2008, donde cayó en coma. Los médicos hasta el momento no pueden ofrecer un diagnostico a Yovan y su familia.

Durante los 4 años el niño permaneció en su casa, dado que los médicos le dieron de alta del hospital criticando a sus padres y acusándoles de no dejar al menor morir en paz y seguir luchando empecinadamente por su vida. Gracias a las acciones de su familia y de dos doctores que durante todo este tiempo intentaban salvar a Yovan, el menor ha superado el coma.

Gracias a Dios ahora podemos volver a la vida normal”

Ahora Yovan  ya es capaz de valerse por sí mismo. El niño muestra interés por la música y los videojuegos, puede escribir y se comporta como cualquier niño de su edad. Ya poco a poco también está recuperando su memoria. La única cosa que por el momento él hace con dificultad es hablar, solo puede pronunciar dos palabras: “mamá” y “papá”. Los médicos explican que las zonas del cerebro responsables del habla necesitan un poco más tiempo para recuperarse.

“Gracias a Dios ahora podemos volver a la vida normal”, suspira la madre del niño.