Tokyo Electric Company (TEPCO), operadora de la central nuclear de Fukushima, informó que intentará reducir la cantidad de material radiactivo en el fondo marino cerca de la planta, tras detectar niveles de radiación entre 100 y 1,000 veces superiores a lo normal.
Por ello, quiere instalar en mayo frente a la planta, gravemente dañada por el tsunami del 11 de marzo, un dispositivo de depuración con zeolita, un mineral que absorbe sustancias radiactivas, para reducir la contaminación en el agua marina, informó este miércoles la cadena NHK.
Las muestras del estudio, tomadas la semana pasada en dos puntos diferentes situados a una profundidad de entre 20 y 30 metros, contenían entre 1,400 y 1,200 bequereles por kilo de cesio-137 y cesio-134 y entre 98 y 190 bequereles de yodo-131.
Las dos localizaciones están a unos 3 kilómetros frente a las costas de los pueblos de Minamisoma y Naraha, 15 kilómetros al norte y 20 al sur de la central, respectivamente.
Las sustancias pudieron depositarse en el océano tras ser expulsadas al aire por la planta o pudieron ser arrastradas por las fugas de agua contaminada que acabaron en el mar, según TEPCO.
Este lunes la eléctrica detectó un nivel 5,800 veces el permitido de yodo radiactivo cerca de una toma de agua del reactor 2, el cual tuvo fugas en los días posteriores al desastre.
TEPCO cree difícil evaluar los resultados de las muestras, pues no existen límites legales en cuanto a la presencia de estas sustancias en el lecho del océano, y dice que continuará estudiando el impacto de estos niveles en la vida marina.
Por su parte, el Ministerio de Ciencia japonés no detectó ninguna sustancia radiactiva en un medición realizada en un en fondo marino situado 50 kilómetros al sur de la central y en otro situado a 200 kilómetros al norte de Tokio.