Al este de la isla de Tenerife, en el municipio de Güimar, se encuentra el barranco de Badajoz, lugar muy enigmático, donde sucesos inexplicables se han ido produciendo, entre todos ellos destacan, el caso de la niña de las peras, los seres blancos, los seres alados y la presencia de los nazis.La leyenda de la niña de las peras, se desarrolla en los primeros años del siglo XVIII, cuando una niña es enviada, por sus padres a buscar fruta, pero la niña no regreso a casa, por lo que todos los vecinos del lugar la buscaron desesperadamente, todos los esfuerzos fueron en vano, ya que la niña no apareció. Pero varias décadas después, la niña regreso a su casa con el aspecto que tenia el día que había salido a buscar la fruta.
La explicación que dio la niña a sus padres, es que se había quedado dormida al pie de un peral y que había sido despertada por un ser muy alto vestido de blanco, el cual la llevo al interior de una cueva, que conducía a un jardín donde habían otros seres como el que le acompañaba .Hablo con ellos durante unos minutos y luego la acompaño de nuevo a la salida, ella creía que habían pasado un par de horas……
En el año 1912, dos trabajadores estaban excavando, en una pared de las galerías de agua del barranco, cuando esta se vino a bajo, quedo a la vista una amplia galería, en la cual vieron a tres seres completamente blancos, los obreros comenzaron a correr, barranco a bajo al ver que aquellos seres se acercaban…En cuanto a la presencia de los nazis, en su afán por los temas de ocultismo, los llevaron a recorrer todo el mundo, pidieron permiso a Franco, para ir a Tenerife a investigar unas plantas, por ello, cuando en el barranco de Badajoz, encontraron un embellecedor de daga, que representaba a un ser alado, lo asociaron a los talismanes que iban buscando la SS para Hitler. La obsesión que tenían los nazis en la búsqueda de una raza superior, la cual en algunos escritos la representaban con alas.
Os habéis fijado, siempre seres muy altos y blancos vestidos con túnicas……………….