Caridades islamistas de Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos financiaron una red en Pakistán que reclutaba menores de hasta ocho años para librar la ‘guerra santa’, de acuerdo con WikiLeaks.
Un cable diplomático estadounidense señala que el apoyo financiero, estimado en unos 100 millones de dólares al año, era entregado a través de los países del Golfo Pérsico hasta una red de reclutamiento yihadista en la provincia Punjab de Pakistán, citó el diario local Dawn.
El reporte de noviembre del 2008 de Bryan Hunt, el entonces principal funcionario estadounidense en el consulado de Lahore, se basa en discusiones con fuentes del gobierno local y externas durante viajes a Punjab, la provincia más poblada de Pakistán.
Dice que las fuentes afirmaron que la ayuda financiera de Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos proviene de organizaciones «misioneras» y «caridades islámicas», con ostensible respaldo directo de los gobiernos de esos países.
Arabia Saudita, Estados Unidos y Pakistán dieron un enorme respaldo a los muyahidín afganos que se oponían a la ocupación de tropas soviéticas en la década del 80.
Los milicianos posteriormente prosperaron en la región y se trasladaron a las zonas tribales del noroeste de Pakistán, junto a la frontera con Afganistán, considerada como un centro mundial para la milicia.
Desde entonces ha habido una creciente relación entre los grupos milicianos de la región y en Punjab. En los años recientes, los milicianos han realizado ataques suicidas con bombas aparentemente a voluntad en Pakistán, a pesar de las ofensivas militares contra sus bastiones.
El descubrimiento de que Osama bin Laden vivió en un pueblo no muy lejos de la capital pakistaní hasta que murió a manos de las fuerzas especiales de Estados Unidos anteriormente este mes ha dañado severamente las relaciones entre Washington e Islamabad.
Estados Unidos quiere que Pakistán sea un socio más confiable en la guerra contra los milicianos.
Niños enviados a campos de entrenamiento
Pero la milicia está profundamente arraigada en Pakistán. Para erradicarla, analistas dicen que el gobierno debe mejorar las condiciones económicas para evitar que los milicianos recluten a hombres jóvenes desilusionados con el Estado.
La red en Punjab supuestamente aprovechó la creciente pobreza para adoctrinar a niños y finalmente enviarlos a campos de entrenamiento, dice el cable.
Arabia Saudita, hogar de la rama fundamentalista Wahhabi del Islam, estaría financiando a algunos de los seminarios religiosos extremistas de Pakistán, o madrasas, que capturan a jóvenes ansiosos por librar una guerra santa, representando una amenaza para la estabilidad en la región.
«En estas madrasas, a los niños se les niega el contacto con el mundo exterior y se les enseñá el extremismo sectario, el odio contra los no musulmanes y una filosofía de odio contra gobiernos occidentales y contra el gobierno de Pakistán», declaró.
Describe cómo «las familias con niños múltiples» y «graves problemas financieros», eran explotados y reclutados, informó Dawn.
«El camino hacia el reclutamiento depende de la edad del niño involucrado. Niños más jóvenes (de entre 8 y 12 años) parecían verse favorecidos», dice.