La desigualdad y la discriminación en el sistema educativo de Estados Unidos se extiende cada vez más entre los estudiantes pertenecientes a minorías y discapacitados, así lo señala la Oficina para los Derechos Civiles del Departamento de Educación del país norteamericano.
Por medio de un informe publicado el viernes por el citado Departamento, estudiantes pertenecientes a minorías suspenden más materias, tienen menos acceso a cursos avanzados en la secundaria, y más posibilidad de tener maestros con poca experiencia, que el resto del alumnado.
Las desigualdades raciales a la hora de aplicar medidas disciplinarias, señala, empiezan desde la etapa preescolar; cerca de 5000 preescolares han sido suspendidos al menos una vez, mientras que unos 2500, en más de una ocasión durante el pasado año académico (2011-2012).
“La política de ‘cero tolerancia’ en las escuelas afecta desproporcionadamente a las minorías, con serias consecuencias: los alumnos que son suspendidos correr mayor riesgo de repetir un grado, abandonar los estudios y terminar atrapados en el sistema de justicia juvenil”, apunta el informe.
A juicio del secretario estadounidense de Educación, Arne Duncan, “queda claro que Estados Unidos tiene un largo camino por recorrer para cumplir el objetivo de igualdad de oportunidades para que todos los niños puedan tener éxito en la vida”.
Las duras verdades reflejadas en el citado informe han arrojado luz sobre el ambiente educativo de 49 millones de estudiantes en las 97.000 escuelas públicas que hay en Estados Unidos, y tienen por meta demostrar a las autoridades norteamericanas la urgencia de cerrar la brecha educativa en el país.
Cabe mencionar que esta situación tiene lugar, pese a que uno de los objetivos de la Administración del presidente estadounidense, Barack Obama, en el sector educativo consiste en mejorar el acceso a los programas preescolares, reducir aún más la deserción escolar y aumentar el acceso a la educación universitaria.
Hispan TV