A esto se ha llegado gracias a los bancos centrales, en especial la Reserva Federal que comanda Ben Bernanke que se han dedicado a darle a la máquina de hacer billetes tras la caída de las Torres Gemelas (en aquellos tiempos mandaba Greenspan, pero Bernanke ya estaba en la sombra enredando mucho). ¿Qué nos pensábamos que eran las famosas ‘inyecciones de liquidez’? Fabricar dinero sin más. Y las bajadas artificiales de tipos que tanto nos gustaron en su momento han degenerado en una situación que hace imposible volver a subirlos hasta una cota razonable por la burbuja de deuda que generó. – Manuel López Torrents
Anonymous había dado un plazo de 90 días al máximo responsable de la Reserva Federal de EE.UU para dimitir. Bernanke no ha dimitido. Anonymous inicia las hostilidades de la bautizada como “Operation Empire State Rebellion” (#OpESR) y recuerda que la Reserva Federal mantiene en la pobreza a millones de personas y es responsable de causar la inflación de servicios básicos con la devaluación del dólar, manipular las acciones bursátiles y destinar los impuestos de los ciudadanos a tapar los agujeros de la gran banca.
Bernanke, ex presidente del Consejo de Asesores Económicos de Bush, queda bien retratado en el imprescindible documental Inside Jobs como hombre clave en el gran “atraco”. Ben Bernanke sucedió a Alan Greenspan como presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos en 2006. Los dos han sido fuertemente criticados, incluso por el Congreso de EE.UU.
Un Informe de la Comisión de Investigación sobre la Crisis Financiera, que celebró 19 audiencias y entrevistó a más de 700 testigos, cita entre los grandes culpables de la debacle a los dos presidentes de la Reserva Federal (Fed), Alan Greenspan, que estaba al frente del banco central cuando se formó la burbuja inmobiliaria, y Ben Bernanke, que no anticipó la crisis.
“La mayor tragedia sería aceptar que nadie vio que esto se avecinaba y por consiguiente que no se podía hacer nada”, destacaba la comisión, integrada por seis republicanos y cuatro demócratas. En su informe se denuncia que por cada 40 dólares en activos los cinco principales bancos estadounidenses tenían sólo un dólar en capital para cubrir las pérdidas, lo que implica que una caída del 3 por ciento en el valor de los activos podía haber liquidado a las firmas. Los bancos ocultaron su excesivo apalancamiento usando derivados, entidades fuera de sus balances y otras triquiñuelas….
“Los políticos de EE.UU. no han tomado medidas para procesar a la gente que causó nuestra crisis económica”, denuncia Anonymous, que ha querido hacer coincidir “la respuesta a la no dimisión de Bernanke” con la celebración del día de la bandera.