Para algunos la Ruta Jacobea es un camino de peregrinación hasta la tumba del Apostol Santiago… para otros, es el comienzo de la búsqueda de la vida que la Catedral de Santiago revela a aquellos que saben leer entre líneas… que saben leer en un libro de piedra que oculta grandes claves del saber espiritual.
Louis Charpentier, en su libro, «El Misterio de Compostela», dice que compost quiere decir ‘Maestro de la Estrella’. La peregrinación tiene un origen legendario, anterior a los celtas; la reemprenden los ibéricos, dirigidos por los magos druidas. Era un camino de iniciación, a través de abismos pirenaicos; en verdad, era una peregrinación alquímica, de muerte y resurrección, siguiendo la dirección de la Vía Láctea, de regreso a la Estrella de los orígenes.
Al final de laVía Láctea está la Constelación del Can Mayor.En relación con la leyenda de Compostela y su iniciación, creemos de interés referirnos a una significativa anotación de Ezra Pound, que se hace como al pasar, en su estudio «The Spirit of Romance» («El Espíritu del Romance»). Al referirse a Shakespeare, agrega, entre paréntesis, Jacques-pere. Es decir, ‘Padre Jacques’.
Jacques es Santiago y Jacques fue el nombre comunitario, o de una comunidad iniciática, de constructores de la Piedra, de alquimistas transformadores de la materia; el nombre de la Orden de Peregrinos iniciados deCompostela. Shakespeare sería, entonces, un nombre simbólico, genérico, indicando la clave que hay que buscar en los dramas shakesperianos y en la antigua Albión de Stonhehenge, punto fundamental de la Peregrinación de Compostela, que místicamente terminaría en los hielos hiperbóreos y en la desaparecida Tule.
De todas aquellas personas que llegan a Santiago desde 1088, año de inicio de la construcción, pocos supieron del símbolismo que encierran sus muros… los peregrinos cruzaban sin saberlo, un antiguo enlosado (cambiado en 1927) formado por losas negras y blancas -símbolo templario- en perfecto contraste indicando las dos fuerzas contrarias de la Naturaleza: el Ying y el Yang.
En el sótano, restos de necrópolis suevas, sobre otras romanas más antiguas… un ara romana encontrada bajo la catedral estaba dedicada al dios JÚPITER, dios que había sido utilizado para romanizar al dios celta TARANIS ( cabe pues la posibilidad de que hubiera un santuario o necrópolis celta).
Debió de ser un enclave muy importante para que fuera tan fuertemente cristianizado.En el pórtico de la gloria, el Cristo que destaca poderosamente en el centro, está representado como el de Chartres, dominando las corrientes telúricas a sus pies. Por encima, los 24 ancianos portan instrumentos como en una «Sinfonía del Universo».
Sabemos que los Templarios se instalaron por todo el Camino desde Francia, dejando sus huellas por doquier…a modo de claves que cualquier peregrino iniciado tendría que interpretar.El camino de las Estrellas pues, terminaba donde acababa el mundo conocido, en Finisterre… pero antes el peregrino debía pasar por Noia, uno de los lugares gallegos más mágicos y cargados de leyendas…
la iglesia de esta villa y su cementerio se construyeron sobre tierra traída en barcos desde Tierra Santa, allí unas doscientas lápidas muestran un saber oculto bajo signos arcanos.Un dato curioso… el número nueve, número representativo templario y número sagrado celta, está muy presente en la catedral: Nueve ancianos que llevan en sus manos el calabacín símbolo de la maestría, tuvo nueve torres, 9 vidrieras en la catedral, 9 fustes de la columna del Pórtico…
Antiguamente para aquellos peregrinos que habían ido desvelando las claves, Compostela no era el final del camino, sino una fase de la peregrinación que terminaría al lado del mar, donde termina la última estrella, en Finis Terrae…