Es fácil dejarse atrapar por emociones negativas sin siquiera darse cuenta. Deténte un momento y date cuenta de cómo te estás sintiendo.

Tal vez tenga que ver con tus finanzas, tu trabajo, una relación particular, o tu salud? Sin embargo, si miras debajo de la superficie, descubrirás que en realidad ninguna de estas cosas son las que te preocupan.

Lo que realmente te molesta son las historias que estás contándote a ti mismo acerca de tus circunstancias actuales.

Son estas historias mentales que están causando emociones indeseables. Y cuando te sientes ansioso, preocupado, frustrado o molesto – por medio de la ley de la atracción – estás atrayendo más experiencia de vida que apoya a esas emociones.

Tal vez no puedas hacer nada por el momento para cambiar las circunstancias externas, pero siempre tienes el poder de cambiar la forma en que te relacionas con tus circunstancias dentro de tu mente. Y cuando lo haces – todo cambia!

Con el fin de obtener el control de nuestras vidas, tenemos que ganar el control de nuestro cuerpo y mente, y el primer paso, que tan a menudo se pasa por alto, es aprender a aquietar nuestra mente. Una de las maneras más rápidas para disolver la ansiedad y el estrés es aprender a disociar los pensamientos que causan estos sentimientos.

Hay pocas herramientas más eficaces en lograr la paz interior que una práctica de meditación diaria. Hay muchas maneras diferentes de entrar en un estado meditativo.

En la meditación tradicional, está el proceso de seguir la respiración, que puede ser muy poderoso, pero a veces es difícil para las personas. Escuchar el silencio es una opción alternativa y ofrece un punto de enfoque que es constante. Esta técnica requiere menos esfuerzo y puede que te resulte más fácil que otras formas de meditación.

Un estado meditativo, sucede cuando te quitas del camino y llegas a alcanzar el silencio dentro de tu mente.

Como todo, se necesita práctica para bailar en el mundo y al mismo tiempo estar en estado de quietud internamente. No hay mayor aliado que la quietud para facilitar el despertar interior de tu verdadera naturaleza y darte cuenta de tus interconexiones con todo lo que es.

Con esto viene el reconocimiento de tu poder para cambiar cualquier cosa, desde adentro hacia afuera. Deja un poco de tiempo cada día para estar quieto, relajar tu mente, y simplemente ser. Lleva esta quietud contigo durante todo el día por más ocupado que estés. Cada vez que te sientas estresado o abrumado, recuerda hacer una pausa, respirar y sonreír. Recuerda que nada pueda perturbar tu paz en este momento sin tu permiso.

Tómate un tiempo para hacer una pausa durante el día y volver a recordar dónde está realmente la fuente de todo lo que percibes.

Por: German Carrillo

Fuente: Shamballa de Luz

Imagen del artículo – Fotografía de: Fernando Garcia Aguinaco

http://senderodelmago.blogspot.com.es/2014/12/nada-puede-turbar-tu-paz-sin-tu-permiso.html