(CNN) — Nota del editor: Eric Poole es vicepresidente de mercadotecnia de una importante empresa de medios y es el autor de ¿Dónde esta mi varita?: El triunfo mágico de un niño contra la alienación y las alfombras de pelo largo (Where’s My Wand?: One Boy’s Magical Triumph Over Alienation and Shag Carpeting). Tracey Ullman escribió acerca de Poole: «el mejor escritor desconocido que he conocido».
¿Alguna vez deseaste tronar tus dedos y cambiar tu mundo?
Cuando era niño, yo sí quería. Porque al igual que muchos chicos, era extraño. Y como muchos de la década de los 70, pretendía ser Endora, del programa Hechizada.
Bueno, mis amigos me han dicho que esta no es la primera elección de la mayoría de los niños de 8 años, pues es un poco inquietante y quizá algo patética. Pero, vamos, ¿me puedes culpar?
Yo era un homosexual en ciernes, musical, torpe y sordo de un oído. Tú haz el cálculo. Y el personaje de Endora representaba poder y audacia. Una actitud inflexible.
Así que con la ayuda de una colcha parecida a los caftanes de Endora y que se convirtió en mi capa mágica (cuando tienes 8 años, debes improvisar) podía cerrar mis ojos, agitar mis brazos y lanzar hechizos para cambiar mi mundo. El que tenía estaba compuesto de una madre obsesiva compulsiva, de bravucones ágiles y torpes, y una serie de eventos desafortunados que cambiarían a la mejor bruja.
Por supuesto, ahora soy un adulto. Y ya no uso la colcha andrajosa, principalmente porque a esta edad ya no es lindo. Pero como la mayoría, todavía busco una conexión mágica, esa idea de que tengo un poco de control sobre mi propio universo. Porque seamos realistas, las cosas están un poco retorcidas actualmente.
¿Y cómo invocamos la magia como adultos?
Tengo algunas ideas que me gustaría compartir y que me han funcionado. Puedes sentirte tranquilo de saber que ninguna involucra peinados cardados o pociones; son simples actividades que, al menos a mí me acercan a los elementos místicos de la vida.
Primero: trata de meditar
Enfatizo trata, porque para mí quedarse quieto es una forma de brutalidad que debería tratarse por la convención de Ginebra. Como una persona con dos empleos, como ejecutivo de una estación de televisión y como escritor, a menudo me es difícil detenerme por un semáforo sin revisar mi correo electrónico.
Pero cuando medito, suceden cosas mágicas. Nuevas ideas. Avances emocionales. La letra patra una nueva canción de gangsta rap. Lo que hace que desconectarte valga la pena.
Segundo: ten un dream board (tabla de sueños)
No te rías. Creo que esos horribles pizarrones de corcho (donde pegas fotografías de las cosas que deseas) en verdad funcionan. Porque son una gran motivación. Tenía una maqueta de la portada de mi primer libro incluso antes de tener un agente. Y el proceso de publicación no podría haber sido más sencillo.
Por supuesto, un dream board es un panel de acero resistente con imanes, que emana masculinidad. Y está en mi baño, lo que puede ser un poco extraño, pero es el único lugar de la casa a donde sé que iré todos los días con los ojos abiertos. Eso es una audiencia cautiva.
Tercero: trata de hablar positivamente
Hace unos 15 años, tenía una deuda de 53,000 dólares por algunas decisiones de negocios que hice aparentemente borracho o loco. Constantemente reforzaba mi pobreza con mis amigos, como si estar quebrado fuera una medalla de honor, como si fuera el servicio militar o ver documentales de Ken Burns.
No fue hasta que comencé a hablar acerca de cómo saldría de mi deuda que en realidad sucedió.
Hablé positivamente sobre mi situación a quien quisiera escuchar. Y unos meses después, conocí una mujer maravillosa en una fiesta que cambió la dirección de mi carrera, y en un año (un año en el que tuve que trabajar como esclavo en un barco), salí de la deuda. ¿Qué tal la magia?
Cuarto: escucha a la voz en tu cabeza
Sí, aquella a la que normalmente llaman intuición femenina. Sin querer faltar el respeto a mis lectoras, ¡dejen de acaparar la gloria! Todo el mundo tiene intuición, pero la mayoría no la escucha. Me gusta pensar que es un susurro de Dios en mi oído, porque sólo tengo uno que funciona. Espero que sea el correcto.
Por supuesto, algunas veces puede gritar como un voceador y no prestamos atención. Por ejemplo, hace algunos años, una persona me involucró con un estafador. Tuve un mal presentimiento de él desde el momento en que lo conocí. Pero lo ignoré. Y déjenme decir que me costó mucho.
Finalmente, trata de aceptar lo que sucede.
Esto no es muy divertido y de hecho puede ser deprimente. Y debo admitirlo, no siempre lo hago sin intentar arrastrar a alguien conmigo. Después de todo, esparcir el dolor es lo democrático. Pero en realidad existe cierta paz cuando te rindes y dices: «Que pase lo que tenga que pasar, porque estoy demasiado cansado para intentar controlarlo».
Por la estafa que sufrimos, hubo muchos gritos (míos) y lagrimas (también mías). Constantemente me imaginaba la muerte de este tipo en un espectacular y entretenido choque de automóviles. Disfrutaba de eso, hasta que me di cuenta que a la única persona a la que hería mi rabia era a mí.
Así que lo pasé a los abogados y me hice a un lado. Dejé de sentirme enfermo y de gritarle a cualquier persona en la calle, lo que resultó en interacciones mucho más agradables con los policías y personas sin hogar.
¿Estos consejos en realidad funcionan? Creo que conmigo sí. ¿Pero eso importa realmente? La ciencia ha demostrado que el pensamiento positivo acelera la recuperación. Y que la meditación puede mejorar tu salud.
Incluso si estas actividades son solamente un paliativo, ¿qué tanto pueden dañar? Después de todo, vivimos en un mundo donde todos los días hay tragedias y triunfos. Así que quizá, con un poco de pensamiento mágico, podamos inclinar un poco la balanza hacia los triunfos.
La capa no es necesaria.
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