“Lofus buyesca y los filuantes tobos giraban baldos del larón en torno, danzaban urlimur los cabersonos y andaban urchimul los chuversonos.”
Esta frase incomprensible y sin sentido en la realidad subjetiva, es plenamente comprensible y coherente en la realidad general, porque el significado no está en las palabras sino en la esencia de la frase misma. La realidad general es la dimensión de lo posible, del milagro mismo, porque en ella se encuentra el alma de todas las cosas, el cuerpo de enlace entre la materia y la energía que la forma. Trataremos en lo posible de introducirnos en su territorio para comprender como funcionan las cosas en la realidad general, y así poder ver lo que se oculta en la realidad subjetiva, reflejo distorsionado y limitado en el cual habitamos.
De adolescente solía subirme al médano más alto de la playa, y estirando mis brazos hacia el cielo cuan majestuosa ave, pedir al viento que me elevara sobre las olas como algún día hizo Pedro el mago, San Francisco de Asís o algunos monjes tibetanos. Mi mente recorría las costas desde lo alto como una gaviota, pero mi cuerpo quedaba inmóvil amarrado en la arena. Desde ese momento pude ubicarme en cualquier punto espacial que eligiera, la copa de un árbol o debajo de una piedra y observar como se vería el mundo desde ahí. Mi cuerpo nunca se elevó, pero sabía que mi limitación era la duda de que sucediera, porque la física lo contradecía. Que yo no pudiera hacerlo no quería decir que no se pudiera hacer, los ejemplos estaban a la vista, en ese momento una frase que me acompañó toda la vida golpeó mi mente, “todo es posible hasta que se demuestre lo contrario” y fue ésta la que rigió mi búsqueda de la verdad de ahí en adelante. En la realidad general todo es posible, las leyes físicas de la realidad subjetiva no tienen sentido, porque sólo son aplicables en un universo tridimensional, limitado e ilusorio, donde el observador está separado de lo observado, siendo en realidad la misma cosa. Cuando usted duerme, en los sueños roza el universo de la realidad general, usted es a la vez una individualidad y una generalidad, es usted, pero también es el otro, y es el escenario mismo donde se desarrolla. Puede por consiguiente sentir lo que siente un árbol o cualquier cosa inanimada como un edificio y lo que en la vigilia sería imposible e incomprensible, en el sueño es lógico y normal, usted puede estar aquí y allá al mismo tiempo, puede volar, morir y nacer, ser uno, ser otro, rubio, morocho, subir una escalera que en realidad baja o todo lo imaginable que se le ocurra, el tiempo y el espacio tiene un sentido completamente diferente al que se conoce y las limitaciones no existen. La realidad general se comporta como sus sueños, con una lógica diferente, la lógica del “Do”. Es el alma de todo, por consiguiente es todo y nada a la vez, son infinidad de universos coexistiendo en el mismo espacio, es el universo de lo cuántico, la semilla donde nace la realidad subjetiva, el núcleo del átomo divino. Cada universo existe en el protón de cada átomo de hidrógeno existente y estos cohabitan en un átomo primordial que la filosofía oriental conoce como la respiración de dios, el gran péndulo de la existencia. Los principios cuánticos son las leyes que rigen la realidad general, es por eso que en esta realidad, su uso no es lo que parece ni es completo. Me da mucha impotencia ver como se deslumbran, por ejemplo, con determinado libro cuya autora asegura revelar cierto secreto. Mientras los lectores se afanan infructuosamente en conseguir los resultados del principio cuántico de atracción, ella se llena los bolsillos con miles de millones de dólares por su ingenuidad. La ley de atracción no fue revelada, sólo fue dicha, y hay una gran diferencia. Algunos conseguirán resultados, pero no por el secreto, sino por causalidad, no se puede implementar el principio de atracción si no se tiene aunque sea un pequeño acceso consciente a la realidad general y una unidad en los “yo” que a usted lo componen, y sobre todo tener en cuenta que la verdad no se comercializa, el conocimiento sí. La autora le está vendiendo conocimiento subjetivo e ilusorio a la gente. En la realidad general las octavas se entrelazan como cuerdas en un tejido y usted puede montarse en una u otra sin ninguna dificultad, esto se llama salto cuántico. Y usted puede desaparecer de esta realidad y aparecer a miles de kilómetros de distancia en la misma o en otra realidad. En la actualidad esto es usado por los amos y el poder oculto, para ingresar a la realidad general y desplazarse de un punto del espacio a otro, se llaman “portales de salto”, la tecnología utilizada es producto de descubrimientos de Nicola Tesla y tecnología extraterrestre. Se pueden encontrar los diseños originales en la oficina de patentes de los Estados Unidos. Luego subiré en la parte de documentos una copia para el que le interese.
Esto fue una pequeña introducción a la realidad general (IRG). De a poco iremos ampliando conceptos y descubriendo nuevas características de esta dimensión. Conoceremos como influye en nuestra realidad y veremos como su reflejo forma la ilusión de la realidad subjetiva y proyecta el sueño donde se mueven las unidades de carbono creyendo que están despiertas y conscientes de su existencia.
“Hay más cosas en el cielo y en la tierra, Horacio, que todas las que pueda soñar tu filosofía.” William Shakespeare; Hamlet, 1° acto, escena V.
—
Morféo de Gea
Detrás De Lo Aparente nada es lo que parece!!
detrasdeloaparente.blogspot.cl