El Ayuntamiento de Madrid podrá prohibir la circulación de todos los coches en la ciudad si se registran episodios de alta contaminación, según el nuevo protocolo que ha aprobado.
El Consistorio ha endurecido las medidas de restricción del tráfico, que contempla la prohibición total aunque solo en situaciones «excepcionalmente graves» de contaminación.
«Estamos convencidos de que no tenemos por qué llegar a una situación de esas características, pero para ello debemos seguir trabajando en medidas estructurales que minimicen el riesgo», aseguró la concejala de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés.
Para prohibir la circulación de todos los coches, se debe alcanzar el escenario ‘cuatro’ de polución, es decir, que al menos en dos estaciones de medición la calidad del aire superen durante tres días consecutivos los 200 mg/m3 de NO2 (dióxido de nitrógeno) o que dos estaciones registraran valores por encima de los 400 mg/3 durante tres horas un solo día.
No obstante, las alertas por contaminación podrán saltar antes.
El protocolo también contempla medidas previas, como reducir la velocidad, la prohibición de aparcar en el centro de Madrid o reducir la circulación al 50 por ciento.
El nuevo protocolo entrará en vigor a partir de febrero.