El Ayuntamiento de Valencia (Compromís/PSOE) instalará desde el próximo lunes semáforos paritarios en las calles de la ciudad, de forma que a la tradicional figura del hombre andando y parado se le unirá la silueta de una mujer con falda.
El primero de ellos será el del paso de peatones de la calle Xàtiva, junto a la plaza de Toros. Se trata de una primera fase y, posteriormente, se irán extendiendo por más zonas, según ha explicado el Consistorio.
La iniciativa está enmarcada en los actos del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, que se celebra el próximo martes 8 de marzo.
El Ayuntamiento de Valencia está presidido por el alcalde de Compromís, Joan Ribó, un catalán de Manresa que defiende la independencia de Cataluña y la pertenencia de la Comunitat Valenciana a los Países Catalanes. Desde su llegada a la Alcaldía, gracias al pacto suscrito por su partido con los socialistas valencianos, ha promovido algunas “patochadas” municipales difícilmente superables.
Sin duda la más cuestionada fue su decisión de sustituir a los Reyes Magos por tres ‘reinas’ magas republicanas, que fueron invitadas por Ribó a saludar desde el consistorio tras una cabalgata laica.
Se trata de una fiesta que instauró el gobierno de la Segunda República en 1936 y que desapareció al año siguiente. Era el acto final que cerraba la Festa de la Infantesa (Fiesta de la Infancia) que se celebraba en los días previos. Estas particulares ‘reinas’ son llamadas ‘las magas de enero’ para despojar a la celebración de todo componente cristiano.
Recientemente, Ribó cargó al Ayuntamiento valenciano los gastos de un viaje para verse con los ‘alcaldes por el cambio’ en La Coruña. El portavoz popular, Alfonso Novo, denunció que junto a los ediles viajaron también algunos asesores y que, en total, pasaron al consistorio facturas por un importe de 7.212,98 euros. Además de los billetes de avión, la comitiva también cargó al consistorio la manutención y varias noches de hotel. El billete de avión más costoso ascendió a 673 euros y ninguno de ellos bajó de los 350. Además, algunos concejales estiraron su estancia tres días en la ciudad gallega mientras la mayoría pasaron dos noches de hotel.
Justamente éso es : “patochadas” municipales.
No estaría de más investigar quién fabrica ésos nuevos semáforos ( por otra parte claramente sexistas con la falda y el pantalón ), no sea cosa que la empresa sea propiedad de algún pariente o amigo necesitado económicamente.
Nos lo tomamos a risa, pero si nos lo tomásemos en serio sería para …………..