Rusia está concentrando a escondidas sus tropas cerca de sus fronteras europeas, aumentando así los temores sobre una posible invasión rusa a Europa, advierten altos mandos de la OTAN.
Fuentes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han informado este domingo que los altos funcionarios de defensa de la Alianza Atlántica temen que Rusia esté preparándose para llevar a cabo un tipo de campaña militar en Europa ya que Moscú, bajo el lema de ejercicios bélicos, ha estado concentrando sus tropas cerca de las fronteras europeas, en especial en zonas sensitivas y de gran importancia.
Según dichas fuentes, Rusia está ocultando la información sobre su Ejército y, tomando en cuenta el Documento de Viena (1999) que requiere a los Estados participantes a proveer información sobre sus fuerzas y planes militares, tuerce las leyes para poder desplegar sus tropas cerca de Europa.
Lo que Rusia está haciendo no es ilegal pero es torcer las leyes”, ha dicho una de las fuentes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El mecanismo que usa Rusia, aseguran, es de celebrar maniobras militares sin previo aviso, ya que este tipo de ejercicios militares no han sido mencionados en el Documento de Viena, razón por la que Moscú no tiene ninguna obligación de permitir inspecciones de estos juegos de guerra ni de compartir sus planes de despliegue de tropas.
“Lo que Rusia está haciendo no es ilegal pero es torcer las leyes”, ha dicho una de las fuentes de la OTAN.
Además, informaron de la preocupación de que Rusia esté tratando de hacer lo mismo que, según las autoridades occidentales, hizo en la Península de Crimea, es decir, enviar un contingente militar sin insignias para ocupar una zona sin tener que responsabilizarse por ello oficialmente.
Desde el comienzo de la crisis ucraniana en febrero de 2014, la OTAN y EE.UU. han aumentado su presencia militar cerca de la frontera de Rusia, una medida que ha provocado duras críticas del Kremlin, además de generar protestas en varios países europeos, incluida Ucrania.
La crisis también provocó un enfrenamiento en las relaciones de Moscú y Occidente, pues Washington y sus aliados acusan al Kremlin de apoyar a los independentistas del este del país eslavo, mientras Rusia rechaza las “infundadas” acusaciones en su contra.
hgn/ktg/nal
Nada hay en Europa estratégica o económicamente interesante para Rusia. No es más que la típica paranoia armamentística. Rusia tiene otros objetivos y otras prioridades.
Los territorios codiciados por las grandes potencias no incluyen a Europa. Sólo somos un mercado para sus productos.