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Si hay una entidad caracterizada por la innovación en Estados Unidos, esta es laAgencia de Proyectos de Investigación de Defensa, conocida como DARPA. DARPA ha desarrollado muchos inventos que han cambiado la humanidad, entre los que destacan satélites, robots, y el mismísimo Internet. Fue creada en 1958 con el objetivo de innovar frente a los rusos, y cuenta con un presupuesto anual de 3.000 millones de dólares y 240 trabajadores.

El objetivo principal que tienen los descubrimientos que hacen en DARPA suele ser para la Defensa de Estados Unidos, es decir, militar. Aun así, un invento que tenga aplicación militar también puede suponer una mejora en el día a día del resto de ciudadanos. Este es el caso del brazo biónico que llevan años diseñando, y que finalmente pondrán a la venta a lo largo de este año.

Los brazos biónicos son brazos robóticos que se pueden controlar con la mente. Es un área compleja que mezcla campos médicos como la neurología como el campo electrónico de diseño de hardware y de software.

El brazo, llamado LUKE en honor a Luke Skywalker, fue aprobado por la FDA americana para ser comercializado, siendo así el primero en alcanzar el mercado. Para funcionar, utiliza un sistema de electromiograma, que detecta las señales eléctricas de los nérvios y los músculos. Este sistema fue descubierto hace varias décadas, y lleva todo ese tiempo perfeccionándose para crear innovaciones como esta. La clave de LUKE es que permite reconocer las señales de movimiento, control y fuerza, y transformarlas en movimiento real en el brazo.

El sistema está compuesto de varias partes móviles, tal y como sería un brazo normal. El hombre, el codo, la muñeca y la parte de los dedos son móviles. Con el brazo, se puede alcanzar la parte de atrás de la cabeza o la parte trasera de la espalda. La parte del codo es suficientemente fuerte como para levantar 5 kg desde el suelo hasta una mesa. También permite agarrar un vaso y moverlo desde la cintura hasta por encima de la cabeza de manera estable. Por último, una tarea compleja de precisión que es posible realizar es agarrar y mover huevos, que son sensibles a ser rotos al más mínimo fallo de presión. Esto es gracias a que el brazo cuenta con un sensor de agarre, que permite al usuario saber lo fuerte que está agarrando algo. En este vídeo podemos ver cómo funciona.

Este brazo supone una revolución para los ciudadanos que han sufrido amputaciones o malformaciones, y abre la puerta a la investigación biónica que mejore incluso a los brazos humanos. Quién sabe, a lo mejor dentro de unas décadas habrá humanos biónicos similares a los de Call of Duty: Black Ops III.