Algo extraño está ocurriendo en uno de los lugares más gélidos de la faz del planeta Tierra. Deslumbrantes lagos azules están apareciendo como flores en primavera en el Glaciar Langhovde, Antártida Occidental. Y esto tiene preocupados a los científicos porque han visto el mismo escenario antes: en Groenlandia.
Lagos en el glaciar Langhovde. Los «lagos supraglaciares» —estanques de agua líquida localizados en la parte superior de un glaciar— han estado esparciéndose a lo largo de Groenlandia por años. Son tanto un signo de calentamiento global como la causa de colapso de las capas de hielo: a medida que el agua derretida de los efímeros lagos drena en el hielo subyacente, lubrica los cimientos de las capas y las debilita. Esta sería una de las razones principales del acelerado deshielo en Groenlandia en la actualidad.
Ahora, los lagos han saltado al otro lado del mundo, afectando una capa de hielo que había gozado de relativa estabilidad en comparación con sus vecinas boreales, reporta el Washington Post.
Drenaje de algunos de los lagos supraglaciares durante un periodo de 12 días, entre el 14 (arriba) y el 26 (abajo) de enero de 2005. Un nuevo estudio publicado en Geophysical Research Letters presenta imágenes satelitales y datos meteorológicos para construir el primer registro a largo plazo de lagos producto del deshielo en la costa de la Antártida Occidental. De acuerdo a los autores, desde el año 2000 hasta el 2013 han aparecido cerca de 8.000 lagos.
Hace un par de años, la NASA había presentado otro estudio en donde se aseguraba que la Antártida Occidental había entrado en «un estado irreversible de decadencia, sin nada que impida que los glaciares en esta área acaben derritiéndose en el mar». Esto podría derivar en un futuro cercano en un progresivo aumento del nivel de los mares, con consecuencias devastadoras para las ciudades costeras.
Artículo publicado en MysteryPlanet.com.ar: Miles de lagos azules invaden la Antártida Occidental (y eso no es nada bueno) http://mysteryplanet.com.ar/site/miles-de-lagos-azules-invaden-la-antartida-occidental-y-eso-no-es-nada-bueno/