Escrito por Ralf B. Leepman para Buscando La Verdad
Ser médico en España implica una serie de actuaciones en contra de la ética profesional. La ley ampara a estos licenciados siempre que usen la farmacología impuesta. Pero… ¿Por qué los médicos deberían ser suspendidos?
Cuando una persona se licencia en medicina, al acabar su carrera se inicia con un juramento. El denominado Hipocrático. Donde se afirma que el médico está al servicio del paciente. Y esto estuvo muy presente hasta bien entrado el siglo XX. Donde las medicinas naturales, los tratamientos fitoterapéuticos, las tinturas y ungüentos hacían su papel. Tras la Segunda Guerra Mundial, el nuevo pensamiento inculcado fue que sólo el médico oficial estaba autorizado a prescribir cualquier fármaco. Después, en los setenta incluso se llegó a suprimir que cualquier médico naturista pudiera diagnosticar.
Hablemos de ello. ¿Qué es un médico naturista? Es un profesional que ha estudiado en una escuela la ciencia médica, usando como recurso los cientos de años de experiencia tradicional y conocimiento acumulado por miles de terapeutas que ejercían con las plantas, el agua y la espiritualidad el oficio de médico. Y digo espiritualidad porque en antaño, los médicos daban apoyo a sus pacientes. Sobre todo cuando estos estaban a punto de fallecer. Hoy, en lugar de establecer una legislación coherente con estas disciplinas, se marginan. Sus medicamentos se prohíben, recuerdo que cuando estaba en el poder la señora Pajín, que fue ministra de sanidad durante un tiempo (¡Vaya ejemplo! Critican que un médico naturista no es médico y ponen de ministra de sanidad a una iletrada) prohibía el anís estrellado por ser causante de cólicos en los bebés. Y era porque una reconocida marca farmacéutica había sacado un nuevo producto mucho más caro que nadie consumía. Pero lo que me ha llevado a escribir este artículo es el colesterol. Sí, esa maligna grasa que nos parasita las arterias embotando de cemento viscoso y amarillo nuestros túneles de savia hasta situarnos en el peor de los estados. Esto es, comida de hospital de por vida.
¿Qué es el colesterol? Según las farmacéuticas, que son quienes instruyen a los médicos, el colesterol es una grasa, tipo cera, que se obtiene con una dieta de origen animal y que está presente en las grasas y vísceras. Y cuya labor, entre otras es la vitamina D, hormonas sexuales y sales biliares. Y que en exceso obstruye las arterias. Para ello los médicos recetan estaninas y dieta pobre en grasas. Ahora bien. Veamos qué es el colesterol. Se trata de un lípido, es decir, una grasa que genera nuestro cuerpo y que también adquirimos con la dieta, principalmente de origen animal, aunque hay frutos como el aguacate que también posee.
¿Por qué sube el colesterol? Realmente el colesterol no sube, es decir, no aumenta sus valores de generar mucho colesterol. El Ser Humano no puede asimilar más colesterol al día que el que aportan dos huevos. Lo que ocurre es que esta grasa permanece en sangre durante mucho tiempo si no se solucina.
El colesterol, es un reparador de arterias, por eso no existe en las venas. Lo que hace que el colesterol se deposite en las arterias son los hidratos de carbono. Veamos. Imaginemos que nuestras arterias son un tubo liso muy flexible y que esta impoluto. Al comer hidratos de carbono simples, pan, pasta, dulces, azúcar, etc. Estos se comportan como un papel de lija que raya la superficie de la luz arterial. El colesterol al pasar y ver el arañazo no hace nada, sin embargo tras varias pasadas, estos arañazos se hacen surcos, y es ahí donde se deposita el colesterol, para paliar ese daño y cimentar las fisuras. Pero volvemos a ingerir azúcar y se vuelven a producir más arañazos y el depósito de cemento aumenta, tanto que al final tapona la arteria.
¿Y cómo se soluciona? Pues es bien sencillo. Con zumo de naranja, es decir, vitamina C que repara las arterias y deshace el cemento del colesterol y Sol. Que hace que ese colesterol sintetice la vitamina D. No hace falta tomar medicamentos para paliar el colesterol, simplemente hay que dejar de tomar azúcar. Está demostrado que una persona que deje de consumir HdC y aumente su ingesta de proteína animal y grasa reduce drásticamente su colesterol en sangre. Por la sencilla razón de que el depositado se disuelve.
¿Y esto los médicos lo saben? Deberían ya que se estudia en la facultad y fuera de ella. Pero como digo al principio, es mejor disfrutar de una economía saneada y buenas vacaciones pagadas por recetar fármacos que decirle al
paciente, no consuma azúcar es un veneno que le mata lentamente. Y quedarse sin vacaciones. Sabiendo esto, un médico que recete fármacos sin orientar a su paciente sobre cómo eliminar el colesterol debería ser suspendido. Por causar más daño que beneficio a la persona.
Los efectos secundarios comunes de los fármacos para reducir el colesterol incluyen los siguientes:
• Diarrea o estreñimiento.
• Dolor abdominal, retortijones, abotagamiento o gases.
• Náuseas.
• Vómitos.
• Dolor de cabeza.
• Somnolencia.
• Mareos.
• Dolores musculares o debilidad.
• Rubor (piel que se enrojece y se pone tibia).
• Problemas para dormir.
Creo sinceramente que habrá algunos médicos que practiquen lo natural, pero por desgracias son una minoría. Tampoco veo que el gobierno esté por la labor de cambiar y mejorar una ley que ampare las medicinas alternativas. No mientras en el ministerio haya farmacéuticos en lugar de personas honradas.
Ralf B. Leepman.
Pues no sé qué médicos frecuenta Ralf, pero los que yo conozco ( y son varios ) jamás han recomendado el consumo de azúcar. Al contrario, siempre hacen hincapié en el consumo moderado de sal y de azúcar ( y éste último incluso suprimirlo en lo posible ).
Por otra parte lo lógico sería que los » …miles de terapeutas que ejercían con las plantas, el agua y la espiritualidad el oficio de médico. » recetasen plantas, agua y espiritualidad ¿ no ?. ¿ Por qué se empeñan en disfrazar sus preparados como medicinas ?
Y por último señalar que los médicos » aconsejan » pero no » obligan «. Cada cual debe informarse y decidir por sí mismo qué desea tomar y qué no. Los primeros responsables de nuestro cuerpo y salud somos nosotros.
Es, que esto de sembrar el caos en la población es un buen negocio. Vaya que si lo es!