La víctima, de 31 años, fue objeto de insultos y burlas, y llegó a mudarse de ciudad
Famosos y medios de comunicación participaron en la difusión de los mensajes ofensivos
T.C. se suicidó el martes de la semana pasada después de más de un año de insultos y humillaciones por la difusión de un vídeo de contenido sexual donde ella aparecía.
Su expareja se encargó de hacer públicas las imágenes a través deWhatsapp una vez terminada la relación, pero estas también llegaron a ser compartidas en las redes sociales e incluso enalgunas páginas web.
VARIAS PARTES IMPLICADAS
El acoso que recibió esta mujer, de 31 años y originaria de Nápoles, no tuvo límites. Se hicieron ‘memes’, grupos en Facebook y chistes en Twitter con una frase que ella pronunciaba en el vídeo («¿Estás grabando un vídeo? Bravo»). Incluso algunos medios de comunicacion locales se burlaron de su caso, saliendo a las calles para preguntar la opinión de los ciudadanos al respecto, y un grupo musical llamado Tapandosle dedicó una canción en Youtube que llego a superar las130.000 reproducciones.
Futbolistas como Paolo Cannavaro y Antonio Floro Florestambién formaron parte de las burlas, compartiendo un vídeo(que posteriormente eliminaron) en el que se repetía la «famosa» frase.
Según publica Il Corriere della Sera, la joven llegó a recibir insultos tanto por la calle como en su perfil de Facebook.
LA LEY Y LA DISTANCIA NO BASTARON
Ante esta situación insostenible, la napolitana decidió trasladarse a vivir a la Toscana y tenía intención de iniciar los trámites para hacerse un cambio de nombre.
Además, recurrió a la ley para demandar a Google, Facebook y Yotube, exigiendo el derecho al olvido para que retiraran el vídeo y todas las imágenes en relación a su persona de la red, ya que en 2015 consiguió que el vídeo no apareciera en los buscadores, pero seguía existiendo con otros títulos y menciones
Google aún ofrece más de 230.000 resultados para «¿Estás grabando un vídeo? Bravo».
OBLIGADA A PAGAR
La semana pasada terminó el juicio que obligaba a todos los portales y redes sociales a retirar los vídeos e imágenes de la víctima. Aun así, según declaraciones a EFE, la resolución también obligaba a la mujer a pagar 20.000 euros a las páginas web demandadas, argumentando que la mujer había consentido las grabaciones.
Varios usuarios han denunciado en Twitter el machismo que hay detrás de este caso y la responsabilidad de todos aquellos que participaron en las burlas.
«El suicidio de Tiziana Cantone, la mujer muerta por un duro vídeo online, no indica los males de internet sino los males de nuestros tiempos»
«Y si me acosan me lo he buscado, y si hago una felación me lo he buscado. Italia, un país retrógrado y machista»
«Y si Tiziana Cantone está muerta también es culpa mia por cada vez que repetí esa broma»
Por el momento, la Fiscalía de Nápoles Norte ha decidido abrir un sumario por inducción al suicidio.Hasta ahora se desconoce la identidad de la expareja de la víctima y autor de las grabaciones.