«Hasta el momento no hemos hablado de desplegar una base, pero el acuerdo marco, ya firmado entre nuestros países, no excluye esa posibilidad», respondió a la pregunta correspondiente.

Koyara señaló que «el acuerdo firmado es bastante amplio y no descarta posibilidad alguna (…), incluso instalar una base».

«Si los presidentes, como comandantes en jefe y líderes de las naciones, toman la decisión de instalar una base, entonces nuestros países lo acordarán y nosotros, ministros, lo implementaremos», agregó.

La ministra centroafricana subrayó que el ya creado centro de formación militar ruso en la ciudad de Berengo «no se planeaba como una base militar rusa, pero así se considera ahora».

Distensión

Las autoridades y los grupos armados de la República Centroafricana están dispuestos a sostener una reunión bajo el auspicio de la Unión Africana, reveló la ministra de Defensa del país.

«Los grupos armados están dispuestos a realizar una reunión, nosotros estamos listos para un encuentro, todas las partes interesadas están dispuestas a entrevistarse, y ahora estamos esperando la respuesta de la Unión Africana en calidad de coordinadora, para saber dónde y cuándo se deberá realizar», dijo la titular.

Koyara recordó que poco antes en Jartum tuvo lugar una reunión en la que participaron miembros de grupos armados de la RCA, evento que dio inicio a la preparación de un nuevo encuentro.

Además, Koyara indicó que después del desarme de los mayores grupos armados centroafricanos, Seleka y Anti-Balaka (milicias cristianas), sus miembros podrían incorporarse a las fuerzas de seguridad oficiales.

«El objetivo principal del diálogo es conseguir que se desarmen estos grupos, después tendrán dos opciones, quienes deseen unirse a las fuerzas de seguridad podrán hacerlo», dijo la ministra de Defensa al precisar que se trata de la policía, el Ejército, la gendarmería y otras estructuras de Estado.

La segunda opción, según Koyara, prevé la reinserción social de los combatientes desarmados en el marco de proyectos especializados.

Como resultado del encuentro, centrado en la solución del conflicto en la RCA, deberá elaborarse una hoja de ruta, advirtió la ministra de Defensa del país africano, quien también participará en esa labor.

Además, Marie-Noëlle Koyara descartó que las autoridades de ese país declaren amnistía total.

La ministra centroafricana recordó que una de las recomendaciones dadas al país durante el Foro Internacional de Bangui, fue no declarar la amnistía total debido a una cantidad grande de delitos.

«Todos los que cometieron crímenes deben rendir cuentas por ellos, así que nuestro Ministerio de Justicia deberá hacer un gran trabajo para separar a aquellos a quienes podemos otorgar la amnistía de los que no la merecen», dijo.

Comunicó también que los representantes de Rusia participan de forma oficial en todos los grupos de trabajo para resolver la crisis en la República Centroafricana.

«Los representantes rusos ya participan de forma oficial en todos los grupos que trabajan en planificar y organizar el diálogo centroafricano», dijo la titular.

Koyara recordó que la crisis en la RCA dura ya 30 años.

«Hubo mucho sufrimiento en nuestro país, por tanto puedo decir que es muy importante para nosotros interactuar con todos los países influyentes que puedan ayudar a poner fin a la crisis», afirmó.

Según la ministra, ante la envergadura que cobró la crisis en su país, el Gobierno centroafricano decidió ampliar la lista de mediadores —que antes incluía a la Unión Europea (UE), la Unión Africana y la ONU— e invitó a Rusia y China.

Al final, la ministra centroafricana de Defensa expresó su reconocimiento a Rusia por la ayuda militar para mejorar la capacidad del Ejército de su país.

«Quisiera agradecer a Rusia y es que hoy por hoy es el único país que nos ha suministrado armamento para reforzar nuestras instituciones estatales», dijo Koyara a Sputnik.

Moscú, agregó, «entrena y eleva la capacidad de combate de nuestras Fuerzas Armadas».

«Pero debemos entender que solo entrenamiento no es suficiente, se requiere también armas», remarcó.

En ese sentido, Koyara recordó que el Consejo de Seguridad de la ONU mantiene bloqueado un segundo envío de armas a su país.

«Quisiera que las gestiones diplomáticas conduzcan al levantamiento de este embargo para que nuestro Ejército se arme realmente y sean literalmente estructuras fuertes», dijo.

Añadió que instructores de la Federación de  Rusia ya entrenaron a 1.300 militares de la RCA.

«Para este mes, 1.300 soldados de nuestro Ejército han sido instruidos y entrenados en Berengo», dijo la ministra.

Agregó que «si resulta necesario, este centro de Berengo puede ser ampliado, porque ya ha demostrado su eficacia como plataforma de capacitación».

Según la titular, los militares entrenados ingresaron en el servicio militar en las prefecturas de toda la república, especialmente en las regiones que se vieron afectadas por actividad de los grupos armados.

«Desde que estos soldados se encuentran allí, la situación no solo se ha estabilizado, sino que ha mejorado notablemente; como resultado de estos esfuerzos, el Estado Mayor decidirá sobre la necesidad de aumentar el número tanto de nuestros militares, como de instructores de Rusia», subrayó.

Rusia y la República Centroafricana suscribieron el pasado 21 de agosto un convenio de cooperación militar.

Rusia vs Francia

La ministra de Defensa de la República Centroafricana declaró también que no considera que Rusia y Francia estén compitiendo en el país africano.

«No se olviden que Rusia y Francia son socios, así que sería inapropiado verlas como rivales en la República Centroafricana», dijo Koyara.

La ministra también señaló que la República Centroafricana está abierta a la cooperación con diferentes países.

Además de Rusia y Francia, el país colabora con China y muchos Estados del continente africano, agregó.

«Partimos de cómo la población ve esta cooperación, procuramos ver cómo, desde el punto de vista de una persona común, la cooperación con otros países cambiará su vida, su destino», subrayó la ministra.

La situación en la RCA vivió una escalada de violencia en diciembre de 2013, cuando en la capital, Bangui, se produjeron enfrentamientos entre el grupo islamista Seleka y rebeldes cristianos.

El conflicto ha dejado desde su inicio miles de muertos y hasta un millón de desplazados, según datos de la ONU.

A finales de agosto de 2018 la capital sudanesa acogió una reunión entre los mayores grupos armados centroafricanos, Seleka y Anti-Balaka (milicias cristianas).

Las partes acordaron crear una plataforma común para realizar consultas y emprender acciones destinadas a establecer una paz sostenible en el país.

En la declaración aprobada como resultado de las consultas, los grupos armados llamaron también al Gobierno a comenzar el trabajo de reconciliación con el apoyo de Rusia, la Unión Europea y las organizaciones regionales e internacionales.

https://mundo.sputniknews.com/africa/201901101084637078-bases-militares-rusas-en-africa/