La importancia de las flores en la historia
A lo largo de los siglos y debido a su belleza, las flores han ejercido una poderosa influencia en los hombres y según su color, se ha establecido incluso un lenguaje de las flores.
Ellas han sido asociadas frecuentemente a la renovación de la naturaleza y de la vida, a la juventud y la belleza, al eterno ciclo de la vida y la muerte. Recordemos que, para los griegos, la primavera comenzaba cuando Perséfone abandona el Inframundo para subir a la Tierra. Del mismo modo, existen numerosos mitos relacionados con ellas, de los cuales se deriva su significado simbólico. Podemos encontrar leyendas en las que el protagonista se transforma en una determinada flor. O bien se nos habla de la existencia de una flor cuya magia es capaz de provocar el amor o el odio, e incluso la indiferencia.
Las flores como elementos simbólicos
Un aspecto de este simbolismo es el color, gracias al cual podemos interpretar el lenguaje de las flores. Los diferentes colores y variedades de las flores pueden utilizarse para comunicarle al otro nuestros sentimientos, a manera de mensaje secreto. El mensaje no sólo puede ser de naturaleza amorosa o pasional, sino que también puede transmitir unas disculpas, sentimientos de alegría, esperanza o amistad.
Por otra parte, cuando soñamos con flores es signo de buen augurio. Cuanto más bellas, brillantes y abundantes, mucho mejor. Sin embargo, si en nuestro sueños vemos flores marchitas, su significado no es tan positivo y viene a decirnos que tal vez debamos prestar atención a algún asunto que estamos descuidando.
Qué nos dicen las flores según su color
Estos son algunos del significado del lenguaje de las flores según su color:
Flores rojas:
Simboliza la energía y la pasión de la juventud. Cuando se envían flores rojas al otro se le está comunicando un sentimiento de deseo y de amor apasionado.
Flores de color naranja:
El color naranja simboliza el crecimiento, la amistad y el sol después de la tormenta. Es el gusto por la vida, la alegría de vivir y compartir. Cuando se regalan flores naranjas se está comunicando un mensaje de optimismo en la consecución del amor o la amistad.
Flores amarillas:
Algunos dicen que regalar una flor amarilla en el día de la boda da mala suerte. Otros dicen que es simboliza la traición y los celos. Esotéricamente hablando esto no es así. El amarillo se relaciona con el oro, un metal noble y puro. A su vez, el oro es símbolo de la la verdad, la inteligencia y la razón. Enviar flores amarillas a alguien es, en el lenguaje de las flores, un mensaje de reconocimiento por su buen hacer y su honestidad en el desempeño de alguna acción o de algún trabajo.
Flores de color violeta:
Color espiritual por excelencia, las flores de color violeta son especiales para comunicarle al otro lo especial que es. El violeta es símbolo de la realeza, pero no de la exterior sino de la interior: la nobleza de los sentimientos.
Flores azules:
El azul simboliza la serenidad, la tranquilidad, la paz que permite la apertura hacia la inspiración y la imaginación. Es el color de los soñadores, de los poetas, de los creadores. Las flores azules son únicas para todo aquel que necesita tanto calma y sosiego, como para aquel que se encuentra en pleno proceso creativo y necesita un «empujoncito» para ponerse en contacto con su musa particular.
En conclusión, no solo conocer el lenguaje de las flores, o ser capaz apreciar su belleza, nos hace la vida más fácil. Con sus distintas fragancias pueden fabricarse perfumes embriagadores, sus partes verdes nos ofrecen la materia prima tanto para alimentos como medicamentos. Así pues, no subestimemos el poder del lenguaje de una flor, por muy pequeña e insignificante que nos parezca. Todas y cada una de ellas tiene su lugar en algún sitio del mundo mágico de las flores.