En abril de este año, el Comando Espacial de EE.UU. confirmó que un meteorito llamado CNEOS 2014-01-08, identificado por el Dr. Avi Loeb y su estudiante Amir Siraj en una base de datos de la NASA, tenía un origen interestelar. Ahora se busca organizar una expedición para recuperarlo del fondo del océano Pacífico donde cayó.
Los escombros de CNEOS 2014-01-08 aterrizaron en el fondo del océano cerca de Papúa Nueva Guinea y es posible recuperarlos con un imán. El océano en el sitio tiene ∼ 1,7 km de profundidad y el equipo de Loeb ha hecho complejos cálculos matemáticos para determinar el lugar donde estaría de acuerdo a la trayectoria y ángulo seguido por el objeto tras su entrada en nuestra atmósfera.
«Nuestro plan es movilizar un barco con un trineo magnético desplegado utilizando un cabrestante de línea larga. Estaremos operando aproximadamente 300 km al norte de la isla de Manus», explicó Tim Gallaudet, ex oceanógrafo de la Marina de EE.UU. y ex administrador de la NOAA, quien se ha unido a los hombres de Harvard para el soporte logístico y técnico de la misión.
6/ “I had the pleasure of signing a memo with @ussfspoc’s Chief Scientist, Dr. Mozer, to confirm that a previously-detected interstellar object was indeed an interstellar object, a confirmation that assisted the broader astronomical community.” pic.twitter.com/PGlIOnCSrW
— U.S. Space Command (@US_SpaceCom) April 7, 2022
«El equipo estará formado por siete operadores de trineo, más el equipo científico. El objetivo de la expedición es recuperar fragmentos de ∼ 0,1 mm de tamaño del meteorito que explotó sobre el mar de Bismarck en 2014. Los fragmentos recuperados se analizarán cuidadosamente y se compartirán con la comunidad científica del mundo», añadió.
El viaje, a iniciarse en septiembre de 2022, prevé diez días de estudio durante los cuales se muestreará el área en recorridos corriente abajo, correspondientes a cursos más o menos hacia el oeste. Asimismo, también se tomarán muestras de control en una región donde no se espera ningún fragmento de CNEOS 2014-01-08, para así distinguir adecuadamente las partículas interestelares del meteorito en el fondo marino.
Submitted my first scientific publication in nearly 20 years for Harvard University's Galileo Project on our upcoming expedition to recover fragments from the first observed #interstellar object to arrive on Earth!https://t.co/CbQebKcSAd pic.twitter.com/MOoQaadcDG
— Tim Gallaudet (@GallaudetTim) August 7, 2022
«Estudiando estos fragmentos en un laboratorio nos permitiría determinar las abundancias de isótopos en CNEOS-2014-01-08 y comprobar si son diferentes de los que se encuentran en los meteoros del sistema solar. En conjunto, las propiedades anómalas de los objetos interestelares como CNEOS-2014-01-08 y ‘Oumuamua, tienen el potencial para revisar la sabiduría convencional sobre nuestro vecindario cósmico», explicó Loeb.
«La expedición al fondo del océano alrededor de Papúa Nueva Guinea ilustrará metafóricamente cómo la evidencia científica expande nuestra isla de conocimiento en el océano de ignorancia que la rodea», concluyó.
Un artículo con mayores detalles de cómo será la recuperación de los restos de este objeto interestelar se ha publicado en arXiv.
Fuente: Tim Gallaudet. Edición: MP.