Los mantras para meditar son palabras o frases que inducen a adoptar una actitud de mayor concentración y enfoque. Este tipo de fórmulas lingüísticas se emplean desde tiempos inmemoriales en el hinduismo y el budismo. Es más, casi todas las culturas han dado un valor especial a ciertas palabras o expresiones. En muchas se les otorga incluso un significado sagrado.
La palabra mantra procede del sánscrito. Está compuesta por dos raíces: man, que significa ‘mente’; y tra, que significa ‘protección’. Es decir, la palabra mantra significa, en esencia, protección para la mente. Es tal la trascendencia de este tipo de palabras evocadas a modo de oración que hay quien ve en este ejercicio una forma de trabajar también nuestro crecimiento personal.
Así, quienes utilizan mantras para meditar suelen utilizar una curiosa metáfora: la mente es como el propio océano. A veces está en calma, pero en otras ocasiones se mueve frenéticamente; sobre todo cuando algo la altera, bien sea la acción de otros o una tempestad. En esos momentos es cuando deben emplearse los mantras. Ayudan a aquietar la mente, a serenarla.
“Yo creo que hay un poder en el interior de cada uno de nosotros….mientras más conectes con el Poder que hay dentro de ti, más libre estarás en todos los ámbitos de la vida”.
-Louise L. Hay-
El secreto de los mantras
Hay palabras, expresiones y sonidos que inducen a un estado de mayor relajación. Los mantras son un recurso muy valioso para recuperar el sosiego, la serenidad y la fuerza, en momentos de gran agitación. Sin un trabajo interno sobre la mente, esta suele excitarse fácilmente. También llenarse de violencia, angustia e intranquilidad. Al emplear un mantra, la mente vuelve a su estado de quietud.
Los mantras proporcionan grandes beneficios. Entre ellos están:
- Contribuir a bajar los niveles de tensión y ansiedad
- Aquietar la mente, ayudando así a aligerar los conflictos internos y facilitando el autocontrol
- Incrementar la voluntad y la fortaleza para alcanzar los objetivos
- Ayudar a desbloquear los sentimientos positivos, como la paciencia, la empatía, la generosidad, etc.
Los mantras operan, en cierto modo, como un mensaje subliminal. Son contenidos que están destinados al inconsciente. Traspasan el umbral de la conciencia y penetran en las zonas más profundas de nuestra mente. Así logran su cometido: inducir un estado de conciencia positivo.
Los más clásicos mantras para meditar
Algunos de los mantras para meditar tienen una larga tradición. Los más conocidos provienen del budismo y de la cultura hindú. En ambas, la meditación tiene un profundo valor.
Hay cinco mantras para meditar que se usan desde hace miles de años. Son los siguientes:
OM
- Es el mantra para meditar más universal. De hecho, para estas corrientes filosóficas y espirituales representa el sonido del universo. Es el origen de todo, esa vibración primordial que comprende a su vez a todos los demás sonidos.
- Es más, los auténticos yoguis explican que cuando el propio universo se creó, OM fue el sonido que propició el inicio de todo lo que vemos, sentimos y nos envuelve.
- Por otro lado, cuando ejecutamos este sonido se genera una poderosa vibración con la que poder alinear nuestra conciencia con todo lo que nos rodea, con todo lo que es, fue y será…
OM AH HUM
- Al pronunciar este mantra se logra limpiar el lugar en el que se va a realizar la meditación. Además, su sonido ayuda a incrementar la concentración.
- Este mantra se traduce como “Yo soy eso” y es sin duda el canto perfecto para iniciarnos en esta práctica.
- Para llevarlo a cabo solo tenemos que empezar pronunciando la palabra Om, para después, exhalar e imaginar después el sonido “HUM”.
OM TARE TUTTARE
- Este mantra ayuda a concentrar la fuerza interior. Se emplea para eliminar los obstáculos internos. También fomenta el coraje y la confianza.
- Asimismo, es interesante saber que se recomienda practicar y cantar este mantra cada vez que pasemos por épocas de miedo o ansiedad. No solo nos ayudará a liberar esos temores y a aunar fuerzas. Además, fomenta la creatividad y nos permitirá pensar en posibles soluciones y alternativas.
OM NAMAH SHIVAYA
- Es un mantra que proviene de los hindúes. Se pronuncia para convocar el bienestar y la felicidad.
- Es además un modo de invocar a Shiva, de acceder a ese universo espiritual donde los poderes yóguicos más poderosos pueden favorecer nuestro crecimiento personal y nuestra elevación mental.
- Om Namah Shivayah es un canto de poder porque en él se contiene también el mantra, Om, que es como ya sabemos, la vibración sonora del comienzo de la creación.
- El término namah , significa en sánscrito “salutaciones”, y Shivayah, que significa Señor Shiva. Es por tanto un saludo y una invocación para unirnos a él en armonía.
OM MANI PADME HUM
- Este es uno de los más mantras más conocidos para meditar dentro de la corriente del budismo. Invoca la sabiduría esencial, la unión con el universo y también la compasión del propio Buda.
- Según los maestros del budismo tibetano, la mayor parte de las enseñanzas del Buda se contienen en este mantra, de ahí que se repita con tanta frecuencia, de ahí que sea uno de los más recurrentes para purificarnos, alcanzar la sabiduría, la bondad y esa unión absoluta con el universo.
Ahora bien, lo más importante de estos mantras es su sonido. Los budistas insisten en que no se debe reflexionar demasiado sobre lo que significan. La esencia de todo está en los fonemas y en los efectos que estos tienen sobre la conciencia.
Los mantras propios
Cada persona puede crear sus propios mantras para meditar o simplemente para serenarse y fortalecerse. Hay palabras o pequeñas frases que ejercen sobre nosotros un poder especial. No importa incluso que no tengan un significado claro. Lo fundamental es que nos conecten con una sensación de sosiego y fuerza.
Ejemplos de mantras personales pueden ser: “AVANZAR”, “CRECER”, “SOY LUZ”, “ESTOY BIEN” o expresiones similares. Lo aconsejable es utilizarlas por un tiempo y luego cambiarlas. Debido a que la repetición hace que vayan disminuyendo el poder de influencia sobre nuestra mente.
Los expertos en el tema recomiendan evitar el uso de la palabra “NO” en el mantra. Dicen que esta tiene la capacidad de bloquearnos. Por lo tanto, las expresiones deben estar formuladas en términos positivos. Así, en lugar de decir “NO TENGO MIEDO”, se debe afirmar “TENGO VALOR”.
No olvidemos que la valía de un mantra está principalmente en su capacidad para conectar con el poder interno que todos tenemos.